Con respecto a la reforma del Código Electoral según lo informado por este diario el 30 de agosto, vale recordar que a fines de marzo de este año el abuso y el oportunismo del MPN con Sobisch a la cabeza llevó a la misma Legislatura a su meteórica modificación (ley 165), operando las instituciones como una especie de "comando sorpresa" para burlar lo que en Neuquén, al parecer, nunca llegará a ser el juego limpio de la democracia.
Además de oponerse por razones que comparto, la oposición planteó una vez más la grave falta de seriedad en el tratamiento de este tema, que debió ser materia de profundo análisis y debate (incluyendo consultas, al menos, a la Junta Electoral y a los partidos políticos) para ahondar, además, en otros aspectos de la ley que probablemente debieran ser "modernizados".
Con el objetivo cumplido de "tomar por asalto" el calendario electoral, de alguna manera el oficialismo da la razón, ahora que le conviene, admitiendo casi tres meses después que había otros aspectos de la ley que requerían intervención.
Los ciudadanos, que pagamos cada centavo en dietas, asesores e insumos, entre otras cosas, estamos ya lamentablemente anestesiados, impotentes ante el despilfarro.
Aunque cada cuatro años se maquille o cambie el nombre de los responsables de la ineficacia de estas instituciones que solventamos, quizá el derroche no sea lo más grave: los efectos de sus acciones y omisiones seguirán marcando un declinante destino social en el que, evidentemente, la estrategia es la manipulación y no la participación y representación de los neuquinos.
El 23 de agosto nos dirigimos al consultorio de una neuróloga infantil, en Cipolletti. Tomamos un colectivo de la empresa Pehuenche el interno era el 36, de la línea urbana en el hospital nuevo, a las 15:43, y nos trataron como si fuéramos perros al presentar un carné de discapacidad de dos niños con acompañante cuya identidad se reserva.
El chofer nos agredió diciendo "Con un carné de mierda, de yapa que los llevamos gratis..." y se puso a decir cosas con otro hombre que venía hablando con él.
Estábamos mi hermana María Claudia Morales, DNI 16.816.928, su hijo oriundo de Choele Choel, mi hija oriunda de Chichinales y yo.
Queremos agradecer al personal policial de los destacamentos de los barrios Don Bosco y 582 Viviendas, dependientes de la Comisaría Seccional 22ª de Zapala, que estuvieron de guardia el 22 de junio. Con un alto grado de profesionalidad y responsabilidad en su función lograron prevenir un intento de robo en mi vivienda durante nuestra ausencia, efectuando además la aprehensión de sus autores.
Es de destacar la prontitud con que actuaron los efectivos, en una muestra de idoneidad y capacidad para la función que desempeñan en beneficio de toda la comunidad.
"Seguro que no están enterados de que ya volvimos a casa"
Del 17 al 20 de agosto se realizó en la ciudad de Viedma un encuentro provincial de mini-básquet. Nuestros hijos, junto con otros chicos, formaron una delegación de 14 en representación del Club Unión Alem Progresista de Allen y partieron hacia allí con las expectativas lógicas que esto genera.
Todas las delegaciones de la provincia fueron alojadas en casas de familia. Nuestros hijos no: los hospedaron en un polideportivo. Hasta ahí puede resultar comprensible que la organización no haya tenido más hospedaje, pero el desinterés por los nuestros fue tal que, por ejemplo, de la comida tuvo que hacerse cargo la subcomisión de básquet del CUAP... parece que quedamos fuera del presupuesto, aunque sí lo hubo para sortear pelotas entre los participantes (¿habrá sido con el dinero de nuestra comida?). Además, en el polideportivo nunca se hizo presente responsable alguno de la organización.
El sábado se realizó un desfile en el que no pudieron esperar a los chicos de Allen (¿sería que nadie sabía que estábamos?). Terminada dicha actividad, todas las delegaciones se fueron con los clubes que los habían alojado; se entiende que nuestra delegación se quedó sola en la calle y terminó por merendar en una plaza de Patagones.
Por la noche, cena para profesores y delegados... y un nuevo problema, ¿quién se quedaba con los chicos? Por suerte había padres y nuestros profes pudieron concurrir.
Así llegamos al domingo, último día del encuentro (o desencuentro): partido con Jorge Newbery en Patagones. Después de esperar durante dos horas, los nuestros jugaron con un combinado del club local y la delegación albergada por éste. La imagen fue muy triste: en el banco local las dos delegaciones se alentaban entre sí y en el banco visitante, el club Unión solito otra vez y, por si fuera poco, el partido duró la mitad de lo normal. Terminado éste, las dos delegaciones comenzaron un partido real.
Luego de jugar con los nuestros (se sintió como si nos hubieran hecho un favor) y ya para terminar, nos volvimos al albergue, les compramos comida a nuestros hijos y, sin ninguna despedida, nos volvimos.
Cabe destacar, por otro lado, que a los chicos no les hicimos sentir todos estos desplantes y la pasaron bárbaro.
Debemos hacer una mención especial a los profes y a la subcomisión de básquet, quienes debieron trabajar más que si hubiéramos sido locales.
El mini-básquet es sinónimo de amistad; los encuentros son para estrechar lazos aunque, arbitrariamente, a nuestros hijos les vetaron dicha posibilidad.
PD. Quisiéramos avisarles a los organizadores que la delegación de nuestro club fue, participó en todo lo que le permitieron y ya volvió a casa. Seguro que no están enterados. Gracias por nada.
¿Hasta cuándo vamos a seguir lamentando la pérdida de efectivos?
¿Qué tenemos que hacer nosotras para que de una vez nos escuchen? ¿Tendremos que salir a cortar rutas como lo hacen otros?
Claro, nosotras somos esposas de policías y, si hacemos algo de esa índole, seguramente nos van a tratar de quilomberas y negras y no va a faltar quien nos trate de delincuentes, porque en esta sociedad hay de todo.
No olviden que el 5/12/05 fuimos 300 las mujeres que ocupamos distintas comisarías en la provincia en reclamo de uniformes, aumento salarial éste se otorgó de forma burlona, porque se lo colocó en dedicación especial y riesgo profesional, no en el básico, pago en término de los adicionales, becas para nuestros hijos y elementos de seguridad para los efectivos (municiones, linternas, handies, chalecos). Hasta el momento el Sr. Jorge Omar Sobisch no decidió invertir un porcentaje del dinero que entra en la provincia en la seguridad de los efectivos. Pero claro, tratamos con una persona necia. De todos modos, le preguntamos: ¿su plan de seguridad no involucra la de los policías, o piensa que comprando y equipando móviles resguarda al personal?
Al Sr. jefe de la Policía le pedimos que no le mienta a la sociedad diciendo que la provincia invierte plata para mejorar la calidad y la seguridad del policía que trabaja en las calles.
Esperamos que el Sr. Jorge Sapag, que ya es el nuevo gobernador, se acuerde y valore a la policía, porque es ella la que lo va a cuidar, dando la vida por él y por toda esta sociedad, que muchas veces la desprecia.
A los familiares de los efectivos les decimos que podemos entender y sentir el dolor, porque sólo quienes tenemos un policía al lado sabemos lo que se siente cuando se va a trabajar sin poder predecir que volverá.
Le pedimos a toda la familia policial que nos acompañe en esta lucha por los que quedan y para que este triste momento no vuelva a suceder, porque hoy lloramos y recordamos a estos efectivos que dedicaron su vida a preservar el orden y la integridad de toda la ciudadanía.
Sería interesante deponer actitudes intransigentes respecto de los proyectos a financiar con lo obtenido a través de la emisión de los bonos garantizados por la renta petrolera.
En este sentido, proyectos que tal vez en su momento tuvieron algún viso de utilidad social, como el tren Transandino, y otros, como la construcción de autódromos, francamente no tienen justificación ninguna desde el punto de vista de un supuesto cambio de matriz productiva en la provincia. Son, hoy por hoy, sólo una muestra de una suerte de keynesianismo interpretado en forma literal, cuando él mismo sólo se refirió a ironías: la construcción de pirámides inútiles.
Por ello le propongo reconsiderar el destino de los fondos hacia la construcción de Chihuido II, un proyecto multipropósito riego, energía y control de crecidas.
Tal como manifestó don Pedro Salvatori oportunamente, "la diversificación económica es nuestro objetivo central para Cutral Co y Plaza Huincul, y para ello debemos combinar el agua, la tierra y la energía", coordinando dicho emprendimiento con un acuerdo con el Invap y/o ENSI para el estudio y producción de hidrógeno y/o bosques eólicos en dicho complejo y asegurando el control de los medios de producción estratégicos en manos del Estado. En tal caso, podría constituirse una sociedad estatal inenajenable. Váyase por la puerta grande, deje en marcha una obra de proyección estratégica para el futuro de la provincia y de la Nación.