ROCA (AR).- "Le saqué el cuchillo, le di puñaladas pero no sabía la cantidad ni la intensidad. Después me fui a comprar más cocaína. Más tarde me enviaron un mensaje al celular y ahí me enteré que estaba muerta". Esta fue parte de la declaración que hizo ayer Angela Mariana Orozco ante los jueces de la Cámara Segunda del Crimen en la primera audiencia que se sigue en su contra por el homicidio de María Cristina de la Torre.
Este caso ocurrió durante la mañana del 12 de mayo del año pasado a la salida de un boliche bailable de esta ciudad, y el hecho fue presenciado por al menos una persona.
La imputada reconoció en todo momento que fue la autora de la agresión contra De la Torre, aunque tanto en su indagatoria durante la instrucción de la causa, como ayer ante los camaristas, aseguró que no tuvo intención de causar la muerte. "Pensé que la había lastimado", dijo.
Pero además, en varias partes de su relato, la mujer resaltó su adicción a la cocaína. Incluso dijo que esa noche había consumido. Esto fue advertido por el fiscal Edgardo Rodríguez Trejo, y tal vez si la imputada pensó que con esto podría mejorar su situación legal por estar bajo los efectos de la droga, Rodríguez Trejo se encargó de aclarárselo.
"¿Usted sabe que la cocaína no es un atenuante?. La cocaína es responsabilidad suya", le dijo el fiscal. "¿Sabe usted la profundidad de las heridas?. Una tiene entre 9 y 11 centímetros, y la otra entre 11 y 13 centímetros. Más que una actitud de defensa parece otra cosa", le dijo para luego no formularle más preguntas a Orozco.
Lo que sí parece estar quedando en claro, es que el arma blanca no era portada por Orozco, sino por la víctima fatal. Al menos así se desprende de la declaración de Laura Pérez, amiga de De la Torre y conocida de Orozco, quien dijo que la víctima siempre salía con un cuchillo. Esto concuerda con los dichos de la imputada, quien aseguró que De la Torre sacó el arma, y en ese momento, ella la golpeó en la cabeza con una piedra tras caer al suelo. "Cuando sacó el cuchillo entré en pánico", aseguró ante una pregunta del juez Juan Rotter.
El primer incidente ocurrió dentro del Bailantazo del Beto, de donde la imputada fue echada. Allí peleó con De la Torre, quien la acusaba de haberle robado cinco "papeles" de cocaína. Sin embargo, la testigo Laura Pérez aseguró que el robo nunca existió, y que los "papeles" se los había "tomado" De la Torre.
Otro de los testigos que declaró fue Amadeo Long. La imputada dijo que había estado en la casa del testigo antes de regresar a la puerta del boliche a "arreglar las cosas" con De la Torre, consumiendo cocaína y tomando cervezas. "No estaba agresiva. Cuando llegamos a la puerta del boliche, bajó mi sobrino a saludar a un amigo, y las tres chicas también bajaron. Yo me quedé en el auto. Fueron unos 10 o 15 minutos hasta que prendí el auto y subieron. Cuando dimos la vuelta, Angela bajó el vidrio y vi cuando arrojó un cuchillo. Le pregunté qué había pasado y me dijo algo así como 'la pinché y va a dormir en el hospital'".
El juicio continuará hoy con la declaración de más testigos y posiblemente se lleven a cabo los alegatos.