NEUQUEN.- Un incidente se registró cundo un oficial militar salió de su casa -frente a la sede del Comando de la Sexta Brigada- y se econtró con un grupo de jóvenes pintaba esvásticas en su auto y en el de su vecino. El hombre, muy nervioso, intentó agarrar a los autores de las pintadas pero fue interceptado por un muchacho que de un golpe le abrió la frente. Hubo empujones, gritos y amenazas.
El hecho se registró durante la marcha en la que se reclamó la aparición con vida de Julio López. Los manifestantes o más bien algunos de ellos pintaron el auto del funcionario militar de la casa de al lado, desde donde salió una mujer que indignada intentó calmar a su vecino, presa de una crisis nerviosa.
"¿Qué les hice yo? Yo no soy nazi ni asesino ¿Por qué me hacen esto? ¿Qué tengo que ver yo con todo esto?", preguntaba el militar en medio de los manifestantes y al tiempo que las bombas molotov impactaban contra las ventanas del edificio militar.
Los jóvenes que atacaron las viviendas fueron calmados por militantes más experimentados. Algunos de ellos le reclamaron a los periodistas que no saquen fotos, que salgan del lugar y advertían que el incidente "no es la noticia, la noticia está allá, vayan para allá", dijo una muchacha señalando el verde edificio del Ejército.
Dos dirigentes que participaban del reclamo -entre ellos el de ATE Baltasar Alvarez- calmaron al militar, lo acompañaron hasta su casa y lograron alejar a los manifestantes que ya se habían reintegrando a la columna. En pocos minutos el lugar se llenó de militares de civil y enseguida llegó la Policía.
El incidente se produjo durante una marcha de la que participaron alrededor de 1.800 personas y que comenzó a las 19 en el monumento a San Martín.
Era bueno el clima entre los manifestantes. Es que ayer a la tarde fue encontrado sano y salvo el joven Sergio Daniel López, cuya desaparición había sido denunciada hacía una semana.
Ya en el monumento a la Madre, el referente de la agrupación HIJOS del Alto Valle, Gervasio Díaz, fue el primer orador. En sus manos tenía un discurso que fue previamente acordado con las distintas organizaciones que se sumaron a la manifestación. Díaz recordó cada uno de los casos impunes de la región y pidió por Sergio Avalos, Florencia Penachi y Otoño Uriarte. También apuntó contra "los asesinos" del maestro Carlos Fuentealba y contra las autoridades políticas y judiciales.
"Sobisch 100% asesino", gritaron los manifestantes quienes llevaron una pancarta con esa leyenda.
En Roca. Los estudiantes universitarios encabezaron un acto y una movilización por las calles de la ciudad en la que participaron distintas organizaciones sociales y partidos políticos.
Fuente: (Agencia Neuquén).