CUTRAL CO (ACC) - Y fue una fiesta. El centenar de chicos de la orquesta infanto juvenil de Cuerdas de Cutral Co celebró su 4º cumpleaños junto al reconocido músico León Gieco. Y el espectáculo lo disfrutaron las 3.000 personas que se acercaron hasta el gimnasio municipal el viernes por la noche y aplaudieron la propuesta que se extendió por tres horas.

El público empezó a llegar puntualmente a la cita fijada para las 20.30 y ocupó las gradas y las plateas. Las puertas se abrieron antes por la lluvia y el frío imperantes. Pero adentro, el clima fue otro. La fiesta que se vivió tuvo emoción y alegría. Fueron los precoces músicos que abrieron la noche y el público los recibió como se merecía: con un cerrado aplauso.

El director, Marcelo Chevallier marcó el inicio y así ejecutaron un fragmento de la sonata de Scarlatti; Allegro y Pastoral del concierto Nº 8 de Corelli; la baguala "Al aire", y estrenaron además la "Polca del Rosedal" de Marcelo Berbel. Después fue el turno de un tradicional venezolano, el polo Margariteño y cerraron con un carnavalito.

Luego las luces se apagaron y la imagen de la pantalla reflejaba a León Gieco,

que junto a su banda, apareció, se fundió en su propia figura y se apoderó así del escenario. Empezó así a desgranar canciones de su dilatada trayectoria. Desde sus inicios hasta las producciones más recientes, el músico ofreció a los agradecidos asistentes, un repaso de su carrera musical, atravesada por las diferentes etapas de la vida política y social del país. Hubo además, una proyección de imágenes en el que se podían ver retratados los hechos más trágicos de la última dictadura militar pero también de los conflictos sociales más recientes.

Ya al cerrar la noche, los cien chicos de entre 8 y 14 años fueron invitados a volver al escenario para tocar junto al músico. "Canción para luchar" y "De igual a igual" fueron los temas compartidos con León. Y el cierre con lo que ya es un himno en el cancionero popular: "Sólo le pido a Dios". Aquí, también los integrantes del taller especial "Esperanza" interpretaron el tema en lengua de señas.

"Sus cabecitas están a salvo mientras estén con los ojos en las partituras", dijo el autor de "Pensar en Nada" y de esa manera respaldó la labor que se lleva a cabo, con los chicos que provienen de todas las barriadas de la ciudad. Y que por primera vez mantuvieron el contacto con un instrumento a través de la orquesta. Aprendieron a ejecutar violines, violas, chelos y contrabajos.

La llegada de Gieco a Cutral Co fue organizada para compartir los festejos por los cuatro años de la creación de la orquesta infantil, impulsada por la comuna a través de la Dirección de Cultura. Los profes Cecilia Rodríguez, Tania Rubiolo, Axel Rubiolo, Ramiro Carrasco, Laura Calzada y Gino Arriagada, se unieron a sus alumnos, al igual que el acordeonista Oscar Méndez.

La realidad neuquina también se hizo presente, cuando León Gieco mencionó la presencia de Sandra Rodríguez, la viuda del docente Carlos Fuentealba que trajo el petitorio para juntar firmas y exigir justicia. Hubo aplausos cuando también se nombró a Teresa Rodríguez, una víctima que desencadenó la segunda pueblada.

El reloj ya marcaba casi la medianoche cuando las cerca de 3.000 almas se pusieron de pie y despidieron con un cerrado y prolongado aplauso al músico visitante, pero también a los propios. Y así, todo terminó como una calurosa fiesta.