VIEDMA (AV).- Ante la ausencia de tres de los siete imputados fueron suspendidos para mañana los alegatos previstos en el marco del juicio por presunto manejo irregular de fondos en la ex Caja de Previsión Social de Río Negro.

Todo estaba listo para escuchar el alegato de la fiscal de Cámara, Adriana Zaratiegui, la encargada de acusar, pero la ausencia del ex titular del organismo previsional Guillermo Pazzi, así como del ex funcionario Wálter Colombil y su esposa Olga Queupil generó que el Tribunal dispusiera pasar a un cuarto intermedio para el lunes.

Uno de los abogados de Pazzi señaló que su defendido tenía compromisos urgentes que cumplir en Bahía Blanca, razón por la cual no podía concurrir a la audiencia prevista, mientras que de la ausencia de los otros dos imputados nada se dijo.

La fiscal Zaratiegui calificó la actitud como "una falta de respeto", al señalar que "sorpresivamente se informa que Pazzi tenía un compromiso previamente asumido que no fue informado al Tribunal y es difícil entender cuáles son los compromisos más importantes que asistir a la audiencia de debate fijada con suficiente antelación y donde se iba a producir la discusión final".

En los pasillos de tribunales algunos abogados defensores coincidieron con la postura de la fiscal ante las ausencias que además demoran los tiempos de todos tras varias jornadas de audiencias.

Por otra parte, Miguel Cardella, abogado defensor de Oscar López Ocampos , adelantó al Tribunal que el imputado prestará el lunes declaración indagatoria.

Con sus respectivos abogados defensores el resto de los imputados Sonia Nazzetta, Gabriel Papparelli y José Herrero esperaron más de 40 minutos en la sala de audiencias el inicio de los alegatos que finalmente fue postergado.

A todos se les imputa el delito de "defraudación a la administración pública bajo la modalidad de administración fraudulenta" como un hecho continuado durante la gestión de Pazzi al frente de la ex Caja de Previsión Social. Esta administración fraudulenta se habría concretado con distintas modalidades y a través de expedientes que tramitaban en aquel organismo como la presentación de facturas denominadas "truchas", es decir, que no correspondían efectivamente a bienes ingresados a la Caja o a servicios prestados a esta dependencia previsional.