ROCA (AR).- Si la intención del ministro de Gobierno neuquino Jorge Lara fue ayudar a ponerle fin a las fugas de la alcaidía de Roca, lo que en realidad logró fue intentar apagar un incendio con nafta. El encargado de contestarle con dureza, fue su par rionegrino Iván Lazzeri, quien no sólo desestimó el ofrecimiento de alojar presos de Roca en la cárcel de Senillosa, a punto de inaugurarse y sin la posibilidad hasta el momento de alojar a ningún preso, sino que le ofreció los servicios de "nuestro secretario de Seguridad y de nuestro jefe de Policía, para ayudarlo a conducir los conflictos sociales como lo hacemos en Río Negro, sin represión y sin trabajadores muertos".

El ofrecimiento de Lara, publicado ayer por "Río Negro", cayó decididamente mal entre lo funcionarios rionegrinos.

"Me sorprende que el ministro Lara se comunique conmigo a través de los medios de comunicación. Es evidente que el ministro es capaz de ver la paja en el ojo ajeno antes que la viga en el propio", comenzó diciendo Lazzeri en un comunicado.

Antes de seguir con las críticas, que fueron ganado en dureza, resaltó la política penitenciaria de Río Negro, ya que la consideró como "señera en la Patagonia, y que de ninguna manera puede ser disimulada por el incidente de los cuatro evadidos de la cárcel de Roca.

Nuestro Servicio Penitenciario no solo es producto de la más moderna legislación en la República Argentina lo que ha motivado, entre otras cosas, varias ponencias y disertaciones en foros nacionales e internacionales de nuestro secretario de Seguridad Miguel Bermejo-, sino que además, tiene un superávit de plazas que nos permite planificar su funcionamiento por los próximos 20 años".

"Es mentira, señor ministro, que la cárcel de Roca tenga problemas de superpoblación.

Las más de 400 plazas disponibles son habitadas por apenas 270 internos, que se corresponden técnicamente con el numerario del personal penitenciario afectado. Pero por si esto fuera poco, lo invito a cruzar el puente a conocer el nuevo establecimiento de Cipolletti (que contará con 236 plazas), o venir a Viedma para ver el Establecimiento Penitenciario Nº 1 inaugurado hace apenas dos años, y que tiene 240 plazas".

Ya con conceptos cada vez más duro, Lazzeri se dirigió directamente a Lara. "Quiero hacerle saber por este medio, que rechazo sus afirmaciones por temerarias, que rechazo su invitación a dialogar porque usted pertenece a una administración que languidece, y que rechazo, por último, su oferta de ocupar la cárcel de Senillosa".

"Si usted hizo una cárcel que costó los millones que costó, sin saber para qué la iba a usar, tendrá que explicarle a sus comprovincianos qué motivaciones originaron