NEUQUEN (AN).- Una cooperativa de viviendas tiró abajo cientos de álamos ante la estupefacción de los vecinos, quienes exigen el cumplimiento de la ordenanza que obliga a respetar la característica de oasis irrigado en la Confluencia Rural, dentro del área del Paseo de la Costa.
Los pobladores gestionaron una audiencia con el intendente Horacio Quiroga porque entienden que "no se han tomado los recaudos" necesarios para hacer cumplir la norma.
El espíritu de esta ordenanza es la de preservar la arboleda, las acequias y los canales del sector, por lo que antes de tirar árboles y desarrollar una urbanización en la Confluencia Rural es necesaria la presentación previa -y su aprobación- de un estudio de impacto ambiental en la municipalidad. "El encargado de la obra nos aseguró que tiene permiso municipal para cortar la arboleda, pero cuando pedimos ver la autorización, no volvió nunca más", informó el vecinalista Miguel Olmedo. La tala se produjo en una doble hilera de álamos, en un recorrido de más de 300 metros que corría hasta hace unos días paralelo a las calles Los Alamos y Figueroa.
El vecino dijo que este terreno fue adquirido hace "tres o cuatro meses por una cooperativa" tras ser loteada la chacra, y que las tareas operativas que culminaron con la tala y la "inutilización" de acequias arrancaron hace aproximadamente 20 días.
Los pobladores aclararon que no se oponen a que se haga el barrio privado ni que se haya desmontado el manzanar existente hasta hace unos días en el interior el predio. Pero advirtieron que no toleran la falta de respeto a las normas que preservan el pulmón verde del barrio y están contempladas en el plan urbano ambiental.
La ordenanza dice que "dentro de cada parcela se debe respetar el entorno natural protegiendo y preservando las barreras de álamos. Para toda otra especie que deba ser extraída por razones de proyectos se deberá reemplazar por especies nuevas autorizadas por la dirección de Espacios Verdes". Y se debe mantener la red de canales de riego y drenaje, para evitar actos que impacten negativamente en el sector.
Más irregularidades se extenderían a otros sectores del mismo barrio. Olmedo dio ejemplos: "el barrio cerrado pegado al club Alemán cercó a siete metros de distancia del río Limay, cuando debiera haber dejado 15 metros y es zona inundable".
