SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Desde hace ya ocho días, los taxis y remises, a un costo de 30 pesos, son la única alternativa para viajar entre el aeropuerto y el centro de esta ciudad, ya que los colectivos de línea fueron levantados por decisión de la CNRT.

El servicio urbano identificado como línea 72 era prestado desde hace años por la empresa Tres de Mayo con aval del municipio, pero como la terminal aérea está considerada "territorio federal", los vehículos de transporte necesitan una habilitación interjurisdiccional.

Los principales perjudicados por la desaparición de los ómnibus rojos son los empleados de Aeropuertos Argentina 2000 y de la Policía Aeroportuaria, que a diario usaban ese medio a un costo de dos pesos. Ahora se juntan entre varios para abaratar el remise o directamente hacen dedo.

Uno de los habituales usuarios del servicio dijo también que "muchos pasajeros que se bajaban el avión preferían el colectivo". Especialmente los "mochileros" europeos, que también son clientes de los hostels y otros alojamientos baratos.

El colectivo corría con ocho servicios diarios y según la empresa Tres de Mayo, "no era rentable". Manuel Carrasco, representante de la empresa, dijo que aun así pretenden mantenerlo y esperan los resultados de una gestión que inició en Buenos Aires el gobierno municipal.

El aeropuerto está a 13 kilómetros del centro de Bariloche, y para cubrir esa ruta con un transporte de línea, es necesaria una habilitación nacional. Sin embargo otros destinos ubicados dentro del ejido como Llao Llao, Colonia Suiza o Península San Pedro (no menos 25 kilómetros), pueden ser prestados con permiso del municipio.

Carrasco subrayó el contrasentido de que el gobierno nacional haya suprimido el servicio "a pesar de que reconoce desde hace tiempo los subsidios y el gas oil para la línea del Aeropuerto".

Según el empresario, para obtener la habilitación solicitada, la empresa debería disponer un vehículo con motor trasero, suspensión neumática, piso semibajo y otros requisitos que no son exigidos en el transporte urbano. Esto además del trastorno que significa tramitar la verificación técnica en Neuquén.

Carrasco dijo que "en Ezeiza cualquiera puede ver que las líneas regulares urbanas entran el aeropuerto" y en función de ese ejemplo también en Bariloche podría hallarse una solución "sólo con aplicar el sentido común". Por su parte, el delegado local de la CNRT, Alfredo Rodríguez, dijo que la empresa Tres de Mayo no necesita otro vehículo sino que podría cumplir el servicio de la línea suprimida con el mismo que usó hasta ahora "si lo inscribe y lo pone en condiciones de seguridad".