En las aguas del Artico hay menos témpanos que nunca y el deshielo continúa, informó días atrás el Centro Nacional de Información sobre Hielos y Nevadas.
Mark Serreze, científico del Centro, afirmó: "Nunca habíamos visto tan pocos témpanos en nuestras observaciones por satélite y la temporada de deshielos dura todavía otro mes''.
Las mediciones por satélite indican que hay 5,23 millones de kilómetros cuadrados (2,02 millones de millas cuadradas) de témpanos en el Artico, cifra por debajo del récord anterior de 5,31 millones de kilómetros cuadrados, registrado el 21 de septiembre del 2005.
El nivel de los témpanos es particularmente bajo en el sector de la Siberia Oriental del Artico y en el Mar de Beaufort, al norte de Alaska, según el informe. También hay niveles bajos de hielo en el Archipiélago Canadiense.
En el sector atlántico del Océano Artico la cantidad de témpanos no es inusualmente baja, pero hay menos que en temporadas normales, indicó el Centro, con sede en Boulder, Colorado.
Las regiones polares reciben particular atención de los especialistas en el calentamiento global ya que se espera que sean afectadas por ese fenómeno más rápidamente que el resto del mundo y con mayor intensidad.
Serreze dijo en una entrevista telefónica que ``hay cuantiosa evidencia de que estamos empezando a ver el efecto invernadero''. Lo llamativo, agregó, es que el deshielo se está dando a un paso más acelerado que lo anticipado por las computadoras. Reveló que hace algunos años hubiera pronosticado que habrá un deshielo total de los témpanos del Artico entre el 2070 y el 2100, pero que al ritmo actual, ello podría ocurrir en el 2030. Acotó que se formarán témpanos en el invierno, pero desaparecerán en el verano.
