Los dos jugaron relajados, pero uno tenía más obligaciones y se lo tomó tan en serio que armó un baile. Estados Unidos venció sin problemas a Argentina, por 118-81, en la final del Preolímpico de Las Vegas.
Con un plantel memorable, el local hizo un torneo perfecto y demostró que es gran candidato al oro en los Juegos Olímpicos de Beijing.
En tierras chinas, la defensa de la presea dorada estará a cargo de Argentina, que dio el gran golpe en Atenas y también es favorito. Después de lo de
anoche, cada uno de los jugadores pensó en una revancha. Es muy probable que la tengas y seguramente, los estadounidenses no podrán repetir los lujos de la definición de ayer.
Además, claro está, Estados Unidos tiene una espina que nunca podrá sacarse. La derrota en setiembre del 2002, cuando perdieron el invicto ante Argentina, quedó grabada a fuego. Fue un milagro criollo y el adiós a un equipo que se creía invencible.
Anoche, el quinteto de Sergio Hernández no tuvo ninguna chance y la tranquilidad de tener el pasaporte en el bolsillo le jugó una mala pasada.
Una vez más, Luis Scola resultó el mejor jugador argentino. El pivote asumió el rol de líder y no le pesó la responsabilidad. En Houston, su flamante equipo, agradecidos. Lo del Nº 4 resultó tan impresionante en este Preolímpico que fue escogido como el jugador más valioso del torneo.
Y como no le gusta perder ni a la "bolita" es uno de los que quiere revancha en tierras chinas. La posibilidad de cruzarse es concreta y Argentina, con plantel completo, es capaz de dar otro impacto.
Por el tercer lugar, Puerto Rico venció 111-107 a Brasil. Los dos más Canadá irán al repechaje por las últimas plazas rumbo a China.
