NEUQUEN (AN).- "Soy optimista por naturaleza", dijo el gobernador Jorge Sobisch ayer en el inicio de un discurso de media hora en el acto de traspaso del mando al vicegobernador Federico Brollo, en el que mezcló consignas de cara a la elección presidencial, anécdotas de sus gestiones al frente del municipio y la provincia, pinceladas de nostalgias y un pronóstico para el 28 de octubre: "hoy me estoy yendo, porque el 28 de octubre pienso estar en segunda vuelta y si estoy en segunda vuelta ¿por qué no voy a a ganar?".

Si bien la excusa fue formalizar la transferencia del mando a Brollo a raíz de la licencia política que inició para dedicarse de lleno a la campaña presidencial, Sobisch terminó presidiendo un acto que superando el marco institucional, adquirió un neto sesgo político con pancartas con su foto y consignas de la campaña presidencial.

"Se siente, siente, Sobisch presidente...", cantó la gente que colmó el salón auditorio de la casa de gobierno, para recibir y despedir a Sobisch, en medio de abrazos, besos y apretujones.

Aún cuando se adjudicó un futuro de triunfo en las presidenciales, dijo que "si no fuera así, estoy preparado para asumir otras responsabilidades. Ser un hombre de consulta... O hacer una reflexión en voz alta y ser escuchado".

Añadió que "ser presidente es la culminación de una carrera política, pero ser un hombre de consulta es la culminación de una vida".

Ahí fue cuando la emoción le jugó una mala pasada al deslizar la reflexión "qué otra cosa es la política, sino haber 'sapido' -el lugar de sabido-, interpretar la humildad, los sueños" de la gente.

Estuvo a punto de soltar las lágrimas el gobernador en el inicio del discurso y después, en más de una ocasión, también estuvo a punto de ceder por la emoción. Fue cuando evocó su comienzo en la carrera política y en los recuerdos mencionó a Mario Ever Morán, Alfredo Pujante, Federico Brollo y Oscar Gutiérrez.

A Brollo y a Gutiérrez -quienes quedaron al frente de Poder Ejecutivo y Legislativo respectivamente-, los instó a "honrar el compromiso asumido" en todos los años de militancia y gestiones.

"No nos estamos yendo, estamos dejando un espacio para que vengas otras ideas, otras propuestas", dijo el gobernador mirando a Jorge Sapag y Ana Pechen, gobernador y vice electos, que estaban en la primera fila.

Dirigiéndose a ellos señaló que la próxima vez que volverá a firmar el acta del libro de gobierno será el 10 de diciembre, cuando les traspase el mando. "Pero ahí no expresaré palabras", destacó.

"Pero me van a tener cuando fuera, donde fuera y, sobre todo, si hay que defender las ideas de nuestro partido", le dijo a Sapag y a Pechen.

Sobisch se refirió a su trayectoria política como una etapa "plagada de toma de decisiones y de no escaparle nunca al compromiso y las responsabilidades. Lo que hice lo hice de buena fe, con convicciones".

Reiteró que también el 11 de diciembre renunciará a la presidencia del MPN y cerró el discurso con un frase melancólica: "Este es un día muy particular. Podría ponerle como título: lo que el viento se llevó".