LA PAZ.- El presidente Evo Morales denunció ayer al embajador de los Estados Unidos en Bolivia, Philip Goldberg, de realizar tareas de conspiración e injerencia en temas políticos en el país andino.

"Algunos embajadores vienen a hacer política. Tienen plata para dividir organizaciones, manejan plata para hacer seminarios para que de esos seminarios salgan algunas propuestas contra el gobierno. Eso no se llama cooperación, se llama conspiración a un gobierno", dijo Morales.

El mandatario boliviano, sin mencionar el nombre del actual embajador estadounidense, dijo que es paciente de las tareas que realiza el diplomático en Bolivia. "No se hasta cuándo aguantará la paciencia. Pero también tenemos dignidad, y en cualquier momento vamos a tomar decisiones radicales contra esos embajadores que provocan permanentemente. No tengo ningún miedo", indicó.

Morales hizo esa denuncia pública en su encuentro de ayer con unos 26 embajadores bolivianos, ocho encargados de negocios, cinco cónsules y tres representantes ante organismos internacionales que fueron convocados a La Paz para precisar nuevos objetivos de su programa "diplomacia de los pueblos".

Pero el agregado de prensa de la embajada de Estados Unidos, Eric Watnik, aclaró ayer que la cooperación es apolítica y que la ayuda anual a Bolivia llega a 120 millones de dólares. "La cooperación de los EEUU es absolutamente transparente. De manera constante las agencias de cooperación deben rendir cuentas ante el Congreso y el Ejecutivo de los Estados Unidos y ante los contribuyentes estadounidenses (...) Estamos dispuestos a responder a cualquiera indagación que nos llegue por la vía diplomática.", dijo en declaración escrita. El vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, acusó el fin de semana a Estados Unidos de brindar apoyo económico para el funcionamiento de centros de capacitación de grupos de políticos opositores. (AFP)