Reporteros sin Fronteras y la Sociedad Interamericana de Prensa manifestaron anoche su tristeza y preocupación por el asesinato en Paraguay de Tito Palma, periodista chileno que trabajaba en dos radios comunitarias, ocurrido el 22 de agosto de 2007 en Mayor Otaño una pequeña localidad al sur del país.

Esa noche, cuando Tito Palma, de 48 años, cenaba con su compañera, Vilma Martínez, y el padre de ésta, entraron dos individuos con ropa de camuflaje y dispararon al periodista, que falleció en el acto. Su compañera, herida en la pierna, fue asistida en el hospital y testificaría ante la policía en los próximos días. Recientemente, el periodista confió a sus allegados que temía por su seguridad, y la de su familia. Las amenazas de muerte que recibía aumentaron después de que difundiera información sobre la intensificación del tráfico de drogas y gasolina en esa región, fronteriza con Brasil y Argentina.

"Estamos indignados por el asesinato de Tito Palma, que ha tenido lugar en una región muy afectada por la violencia de las mafias y en la que con frecuencia se toma como objetivos a los medios de comunicación. Este periodista ya había denunciado por la radio, y a las autoridades, haber recibido amenazas de muerte , pero no se hizo nada para protegerle ", ha declarado la organización. La SIP también condenó ayer el asesinato y exigió a las autoridades investigar el caso y someter a la justicia a los ejecutores e instigadores.