VIEDMA (AV).- Educación estableció el sistema de visitas domiciliarias para el control de los docentes con licencias.

El esquema está implementado, pero su ejecución es parcial, pues aún no fueron designados todos los profesionales en ciertas delegaciones, mientras que el número de auditores es insuficiente en otras.

Los sistemas de juntas médicas y de auditores médicos fueron acordados entre Educación y Unter para sincerar el régimen de licencias, que siempre separa a funcionarios y gremialistas frente al costo económico-pedagógico que significan esas ausencias en las escuelas rionegrinas.

En Educación estiman que las erogaciones bajaron, pero igualmente el impacto está cercano a los tres millones mensuales. La cartera de César Barbeito insistió en los excesos en las licencias y la Unter cuestionaba las generalidades, mientras advertía a los funcionarios que se debían establecer los mecanismos de control.

La cuestión es urticante en el ámbito gremial. Ayer, el secretario de la Unter, Carlos Tolosa, no se opuso al esquema, pero manifestó que "inicialmente se debería controlar la concurrencia de los funcionarios, los legisladores y los concejales para después avanzar en los trabajadores".

Además del control, Educación planteó en ciertas ocasiones modificar el régimen de licencias, como acotar los criterios de autorización por "enfermedad de un familiar".

En principio, el sistema se concentrará en la supervisión de las licencias que los docentes informan, controladas desde las juntas médicas y con las visitas a domicilios de los auditores.

Las estadísticas consignan que los docentes -en promedio- toman cuatro licencias anuales, curiosamente con menor porcentaje en los meses de receso escolar, incluso en julio se reduce casi a la mitad en la relación a los registros de junio y agosto.

En el mecanismo de control participan Educación y Salud, pero todavía existen dificultades por la designación de los equipos.

Hasta ahora, las licencias médicas solamente se auditan en Viedma, Roca y Choele Choel, aunque el sistema fuera lanzado el año pasado y, además, esas delegaciones reúnen de tres a cuatro profesionales para evaluar las certificaciones y concurrir a domicilios. Por ejemplo, en Roca se cumplen 12 mil licencias anuales, es decir, un millar por mes y hay tres profesionales.

En Educación se prevé que en Cipolletti y Bariloche podría instrumentarse antes de concluir el 2007.

La resolución N° 919 del Consejo Provincial de Educación -que firmó el vocal gubernamental, Daniel Agostino- permite la implementación del servicio del médico auditor laboral, completándose con el sistema de juntas médicas, con dependencia de Salud.

Estas juntas constataron "la necesidad de implementar -en forma análoga a las mismas-, una metodología destinada a la verificación domiciliaria de licencias del personal no docente y de docentes que han incurrido en inasistencias por razones de salud". El médico auditor tendrá a su cargo la verificación domiciliaria.

El mecanismo exige que el docente que requiera su "licencia por razones de salud propias o por atención familiar", deberá comunicar su inasistencia a la escuela cinco minutos antes del inicio del horario laboral, informando además dónde se encuentra con el objetivo de ser visitado por el medico auditor.

Las autoridades escolares informarán a la Unidad de Gestión -utilizando a través de una "Planilla de Información Diaria"- de la nómina de los ausentes.