CIPOLLETTI (AC).- Se hizo un juicio abreviado porque el imputado reconoció el hecho y se declaró culpable.

El pasado viernes, la Cámara Segunda del Crimen condenó a nueve años de prisión a Sergio Adrián Orellana, el joven de 24 años que había sido detenido por el crimen de su pareja, Margarita Hermosilla (23). Fue considerado autor material del delito de "homicidio simple".

El asesinato ocurrió entre las 7 y las 11 de la mañana del 24 de junio de 2006 en cercanías del vivero municipal de la Isla Jordán, cuando el acusado habría discutido con su pareja "probablemente por celos".

Se estima que Orellana habría lesionado a la víctima primero en el rostro -Margarita tenía lesiones de defensa en su mano- "para luego extraer un arma blanca, tipo cuchillo de mango negro con tres remaches, con la que la habría atacado en el cuello causándole lesiones punzocortantes que no llevan a su deceso".

"Minutos después -agrega el fallo- y encontrándose herida la víctima tratando de defenderse de su agresor, éste habría efectuado mecánica de compresión en cuello y obstrucción de la vía respiratoria en boca, causando las lesiones que se observan en el cuerpo de Margarita Hermosilla ocurriendo su muerte a causa de la sofocación".

El 31 de julio se realizó el juicio oral y público, que fue abreviado a raíz de una presentación realizada por el fiscal de Cámara Ricardo Maggi y el defensor Gerardo Tejeda. Ambos propusieron que se declarara a Orellana como autor material del delito de homicidio simple y se lo condenara a la pena de nueve años de prisión.

"El imputado manifestó que admite su autoría y culpabilidad en los hechos que se le imputan, que además está de acuerdo tanto con la calificación legal de los mismos como con el monto y la especie de pena solicitada", indicaron los jueces César Gutiérrez Elcaraz, Guillermo Baquero Lazcano y Pablo Repetto.

Los camaristas entendieron que existía "una convergencia unívoca" de las pruebas que ubicaban al imputado en el lugar del hecho "acometiendo y agrediendo con violencia mortal a quien fuera su pareja".

"Esto en definitiva -evaluaron- enmarca la confesión y plena asunción de su autoría y culpabilidad".

Los jueces compartieron la calificación legal propuesta y consideraron "adecuada" la pena propiciada por las partes. Coincidieron en que no hubo alevosía.

El año pasado el crimen causó conmoción en Cipolletti, sobre todo cuando se conocieron detalles de cómo habría sido la agresión que sufrió la joven. Orellana apareció como sospechoso desde las primeras horas: se presentó en la comisaría Cuarta diciendo que había cometido un hecho de sangre y que "no pudo medir las consecuencias", recordó ayer el juez Baquero Lazcano, quien destacó el trabajo realizado por la jueza de instrucción María del Carmen García García.

El condenado está detenido actualmente en la alcaidía de Roca.