MEXICO (AP) - México y Estados Unidos negocian un acuerdo de apoyo en equipamiento y capacitación para la lucha contra el narcotráfico y que sería más importante que el Plan Colombia, dijo ayer el procurador mexicano Eduardo Medina.
Desde EE.UU. , un funcionario estadounidense, que participa en la lucha antidrogas y que pidió no ser identificado pues el paquete aún no ha sido concluido, confirmó que las negociaciones se hallan en una etapa avanzada y se tiene esperanzas de que al menos partes del programa serán anunciadas cuando Bush y su homólogo mexicano Felipe Calderón se reúnan en Canadá los días 20 y 21 de agosto.
El funcionario confirmó en una entrevista radiofónica reportes sobre un fondo de ayuda estadounidense para México, aunque evitó dar detalles con el argumento de que los componentes del acuerdo "están obviamente en la mesa'' de las negociaciones. "Es un tema que está encabezando la Secretaría de Relaciones Exteriores; ciertamente es más importante que el Plan Colombia, pero desde la perspectiva de que es algo que va a ocurrir en nuestro país'', dijo Medina en Radio Fórmula. Afirmó, sin embargo, que"no habrá bajo ninguna circunstancia una injerencia externa'' en cuestiones operativas internas, por lo que se respetará la soberanía de México. "Puede haber un apoyo en términos sobre todo de equipamiento y capacitación para mejorar nuestras capacidades en esta circunstancia, desde esta perspectiva de corresponsabilidad'', añadió el procurador.
Mediante el llamado Plan Colombia, Estados Unidos ha canalizado desde el 2000 unos 5.000 millones de dólares a esa nación andina
para una campaña antidrogas y de combate a grupos armados ilegales.
México ha vivido en los últimos años un problema de violencia vinculada con una batalla interna entre carteles de la droga por ocupar nuevos espacios, y el presidente Felipe Calderón anunció en diciembre una ofensiva contra el narcotráfico y el crimen organizado.
¿Ayuda o injerencia?
El legislador demócrata por Texas, Henry dijo que la ayuda debe realizarse de manera tal que "sea respetada la soberanía y la integridad de México. Siempre existe el temor de que (México) sea considerado un títere de los Estados Unidos''.
Desde diciembre a junio, Calderón envió a 24.000 soldados a zonas afectadas por la violencia de los narcotraficantes. Pero Calderón se ha quejado de manera reiterada de que Washington no hace lo suficiente para combatir el consumo de estupefacientes o para ayudar a México en su lucha contra los carteles de la droga.
El gobierno ha asegurado que muchas de las armas, algunas de alto poder, que utilizan los narcotraficantes son adquiridas en Estados Unidos. "El nivel de cooperación que hemos tenido (de Estados Unidos) en los últimos años no se corresponde en lo más absoluto o en la dimensión del problema... y eso es lo que está en la mesa'', señaló el procurador.