ZAPALA (AZ).- La jueza del fuero civil, Ivonne San Martín, hizo lugar a la medida cautelar del intendente de Aluminé, Jorge Cuiñas, e intimó al concesionario Petro Aluminé y a la empresa Repsol-YPF a garantizar la provisión de combustibles líquidos para esa localidad en un plazo de 48 horas.

Mientras tanto, la magistrada deberá resolver el recurso de amparo presentado por Cuiñas con el patrocinio del abogado zapalino José María Díaz Villar para que la empresa proveedora abastezca con combustible en forma normal a la ciudad.

La situación es sumamente crítica en Aluminé donde la falta de combustible líquido es una constante de los últimos tiempos. La única estación de servicios de la ciudad pasa más tiempo con las mangueras cruzadas sobre los surtidores que expendiendo y esto provoca daños económicos muy importantes para la zona.

"La decisión de la jueza de aceptar la medida cautelar obliga tanto al propietario de la estación como la empresa a restablecer el servicio en un plazo no mayor a las 48 horas" explicó Díaz Villar.

La medida comenzará a regir luego de que las partes sean notificadas y en caso de corroborarse un nuevo incumplimiento podrían aplicarse severos castigos económicos. "La sanción podría ser variable pero en cualquier caso estarían desobedeciendo una orden judicial, lo cual es muy grave" dijo el abogado.

En los próximos días la jueza deberá estudiar la presentación de fondo realizada por el intendente Jorge Cuiñas y escuchar las explicaciones del concesionario y la empresa Repsol-YPF.

Hace pocos días el propio intendente junto a otros vecinos elevaron un planteo ante el defensor del pueblo de la Nación, Eduardo Mondino. Allí describen la grave crisis que sufren como consecuencia del desabastecimiento al que los tiene sometidos la empresa Repsol-YPF y la firma Petro Aluminé.

Una de las consecuencias directas del conflicto es el acopio clandestino de combustible que realizan algunas personas de la localidad. Además del grave riesgo que esta maniobra provoca, se genera una especulación económica ya que en la reventa se pagan valores exorbitantes.

Según denunciaron los vecinos, la falta de combustible se extiende en algunas oportunidades por lapsos de más de quince días. Más allá de la problemática local, la crisis golpea directamente contra la afluencia turística que prefiere visitar otros destinos donde la provisión se encuentre asegurada ante cualquier coyuntura.