NEUQUEN (AN).- A trece años de haber cumplido su última función pública en la provincia, Horacio Lores se alista para retornar desde una banca en el Senado nacional. Fue el primer y único nombre que definió el gobernador electo cuando comenzó a debatirse en el MPN cómo resolver los cargos en el Congreso y la noche del lunes quedó ratificado como primer candidato a senador, en una lista de unidad. "Es un gran desafío, al que llego en el marco de un proyecto político, porque cuando me sumé al trabajo de campaña no lo hice a condición de nada", señaló.
A pocas horas de la definición de la lista partidaria, en un proceso al que elogió por su transparencia, Lores delineó su futura labor y la del gobierno que encabezará Jorge Sapag. "Será un gobierno de diálogo, de apertura, de consenso y ese estilo se traduce en la elección de sus colaboradores, que tenemos un perfil similar. Hay mucho que esperar del gobierno de Sapag", afirmó.
Auguró una buena relación con el gobierno central, a tono con el mensaje de campaña de Sapag; destacó la actitud de los referentes partidarios para sortear una interna que a su juicio hubiera sido "inoportuna"; reconoció importantes logros al gobierno de Néstor Kirchner, pero expresó su disenso por algunos aspectos.
¿Qué significará el gobierno de Sapag?
Un cambio importante en la forma de gobernar la provincia, empezando por promover un proceso de descentralización, no sólo de recursos sino también de niveles de decisión a niveles locales. Y de equidad desde distintos puntos de vista: territorial, hay zonas ricas y deprimidas y eso traduce en ini
quidad de tipo social, de igualdad de oportunidades para acceder a la capacitación, al estudio y a las fuentes de trabajo. Queremos modernizar el Estado, que termine con una burocracia que en alguna medida es ineficiente e improductiva. Si logramos armonizar estos desarrollos a nivel provincial y tener una buena relación con Nación, podemos generar un cambio positivo para mejorar la calidad de vida de la gente.
¿Es posible una buena relación con Nación?
Sí, por supuesto y nosotros la vamos a plantear para lograr cosas importantes para la provincia. Tengo la experiencia de cuando fui ministro de Felipe Sapag, al haber establecido un buen contacto con el gobierno de Raúl Alfonsín, que nos permitió diseñar el hospital Heller. En materia de vivienda se lograron planes en los hasta les dimos el apoyo de nuestros técnicos y hoy en Neuquén el 25% de la ciudad vive en las 70 tomas.
¿Lo conformó la lista de unidad?
Mucho, porque fue un proceso limpio, transparente. Sapag habló con casi todos los referentes de los sectores y hasta con los afiliados, que pedían a tal o cual dirigente. Y con gestos valiosos, como el de Salvatori. La interna era inoportuna teniendo las elecciones de Plottier y Rincón a la vista.
¿Qué opina del gobierno de Kirchner?
Tiene logros que todos le reconocen: en derechos humanos; recuperó al país en un momento muy difícil. No comparto su estilo y habrá que ver cómo resuelve problemas como la inflación, ya que los índices que se publican no responden a lo que vemos. En energía o todo es achacable a él pero nosotros tenemos una fortaleza importante por ser productores de gas, petróleo, hidroenergía y de las potenciales energías alternativas.