NEUQUEN (AN).- Los tribunales de Faltas de la ciudad se encuentran colapsados ya que, al atraso registrado en los últimos años en las tramitaciones, se sumó en lo que va del año una fuerte reducción del personal que dejó a los organismos con sólo dos notificadores para toda la ciudad. La falta de personal podría impedir que los jueces puedan clausurar obras en construcción, decomisar alimentos en mal estado y cobrar todo tipo de multas.
La crítica situación fue denunciada por las autoridades del Tribunal de Faltas 1, a cargo de Mónica Acuña, en una serie de notas enviadas al intendente Horacio Quiroga, el Concejo Deliberante, la Sindicatura Municipal y la Defensoría del Pueblo. En los escritos se denunció que este tribunal pasó de contar con 35 empleados en 2001 a sólo 17 en la actualidad, de los cuales 3 se jubilarían antes de fin de año, dejando al organismo con menos de la mitad del personal.
Las notas fueron enviadas entre el 11 y el 25 del mes pasado y en ellas se indica que "la alarmante situación" se debe a que desde 2001 a la fecha se redujo a la mitad el plantel de empleados ya sea por renuncias, jubilaciones y ausencias por enfermedades, situación se agudizaría el año entrante cuando se jubilen 3 empleados más. Esta merma de personal se ve agravada por el hecho de que los 35 trabajadores del 2001 no tenían a su cargo las infracciones producto del sistema de estacionamiento medido que no estaba en vigencia, ni el cúmulo de expedientes que hoy ingresan fruto del crecimiento explosivo de las construcciones y de la ciudad en general.
La falta de personal genera atrasos porque "cuando un empleado se enferma quedan sectores enteros sin personal", pero la situación más grave es la falta de notificadores. Según se indicó en los escritos en los últimos seis años la comuna pasó de contar con diez de ellos a sólo dos para ambos juzgados. Deben cursar 15.000 notificaciones por año.
La reducción es consecuencia de una serie de jubilaciones, renuncias y licencias, y al pase a planta permanente de otros trabajadores que eran monotributistas y que como cobraban por célula entregada no tenían limitaciones de horario, y ahora, ya en relación de dependencia, cumplen con la jornada municipal acotada.
En el caso del Tribunal 1, de turno, los dos notificadores que allí se desempeñaban fueron pasados a planta permanente por el Ejecutivo el 1 de julio, cambio que según se indica no fue consultado a las autoridades del juzgado. A raíz de ello el ritmo de notificaciones efectivas se redujo a sólo 7 por día e incluso uno de los notificadores solicitó el pase a otra dependencia.