ROCA (AR).- En noviembre de 2003, los vecinos de Río Colorado tomaron conocimiento de una denuncia por abusos contra una menor, realizada contra el encargado de una iglesia evangélica del barrio Villa Mitre de esa localidad.

La noticia causó indignación, aunque muchos no descartaron que fuera un invento de la chica, que por entonces tenía catorce años.

La investigación continuó, y Raúl Jacobo Betancourt Ortiz (53 años) -el acusado- fue procesado y la causa se elevó a juicio.

El debate se realizó en la Cámara Tercera del Crimen de Roca, y si bien en un primer momento Betancourt Ortiz negó las acusación y calificó la versión como una campaña en su contra, finalmente reconoció que había violado en dos oportunidades a la pequeña que iba al templo a tomar clases bíblicas.

Pero la conmoción que pudo haber causado la denuncia en un primer momento, fue opacada por la decisión de la justicia.

Un acuerdo entre los defensores del imputado, Darío Sujonitzky y Estanislao Casaux; con la asesora de Menores subrogante, Mariana Serra; y el fiscal de Cámara Eduardo Scilipotti; concluyó en un juicio abreviado, en el que el imputado se reconoció culpable y aceptaba la pena que acordaron las distintas partes.

Sin embargo, la condena fue de tres años, pero en suspenso. Es decir, no irá preso.

Los juicios abreviados se pueden realizar cuando el delito por el que se acusa no supera los seis años de condena.

La calificación de estupro permitió esto, y a pesar de haber reconocido que violó y le exhibió material pornográfico a la niña en el mismo templo, Betancourt Ortiz no irá a prisión.

La calificación de estupro, por ser la víctima menor de 16 años, prevé una pena de 3 a 6 años de prisión.

En su voto, el camarista Fernando Sánchez Freytes, señaló que "no está debidamente acreditado con las constancias de la causa que sus accesos carnales hayan sido materializados contra la menor con alguno de los medios comisivos a que hace referencia el artículo 119 primer párrafo del Código Penal (será reprimido con reclusión o prisión de seis meses a cuatro años el que abusare sexualmente de persona de uno u otro sexo, cuando ésta fuera menor de trece años o cuando mediare violencia, amenaza, abuso coactivo o intimidatorio de una relación de dependencia, de autoridad, o de poder, o aprovechándose de que la víctima por cualquier causa no haya podido consentir libremente la acción), como así mismo no está lo suficientemente constatado que él haya ostentado en la ocasión, el cargo de ministro de algún culto (reconocido o no), y que en razón del mismo se aprovechó de la misma".

El voto de los jueces

"También coincido en que la prueba de autos es sumamente escasa como para poder endilgarle al mismo el delito de promoción a la corrupción, pues todo indica que el despliegue de ciertos actos

libidinosos de su parte, en contra de la menor, apuntaron, más que nada, al logro de su propósito (los accesos carnales en sí mismo), y no a provocar la creación de un estado de depravación en la víctima".

"Por lo expuesto, juzgo acreditado que el imputado Raúl Jacobo Betancourt Ortiz, abusó sexualmente en dos ocasiones, mediante acceso carnal, a la menor, quien al momento de los hechos contaba con 14 años, tras aprovecharse de su inmadurez sexual y en razón de la mayoría de edad. Emerge de autos que en fechas que no se pudo determinar con exactitud, pero acontecido durante marzo de 2003 y con anterioridad al 16 de setiembre de 2003, en horario de 7.15 a 8, en el interior de la iglesia evangélica del barrio Villa Mitre de Río Colorado, y en la que ambas frecuentaban como feligreses, el procesado, aprovechando que la niña pasaba por allí para dirigirse al colegio, la invitó a ingresar en dos ocasiones diferentes, oportunidades éstas en las que la accedió carnalmente".

Los otros dos integrantes de la Cámara Tercera, Carlos Vila y Aldo Rolando, coincidieron con el voto de Sánchez Freytes.