BAHIA BLANCA (Télam).- Una reunión multisectorial analizó ayer en Bahía Blanca la salinidad de las aguas del río Colorado, que según advirtieron productores de esa zona sur bonaerense amenaza con "arruinar sus cosechas".

Los productores pidieron a los gobernadores de las provincias ribereñas ubicadas al sur de ese curso de agua "la urgente atención" del problema. Todo se inició a raíz del conflicto que mantienen Mendoza y La Pampa por la disponibilidad de agua, y luego que autoridades de esta última provincia procedieran a la apertura del llamado "Tapón de Alonso", lo que hizo que las aguas del río Curacó que pasan por la laguna La Amarga ingresen al río Colorado. Según productores de la zona, esa situación que ya generó la protesta de los intendentes de Río Colorado, Villarino y Patagones ha "duplicado la salinidad del río Colorado", a la vez que "perjudica" a su población "y al sector productivo que se encuentra aguas abajo". El problema fue analizado ayer en el marco de una reunión multisectorial integrada por funcionarios y ediles de Bahía Blanca, junto a sus pares de los partidos de Villarino y Patagones.

Al finalizar la reunión, los presentes se comprometieron a continuar con las conversaciones entre los distintos sectores involucrados para poder encaminar esta difícil situación. Para los que participaron del cónclave, Mendoza tiene la última palabra.