"El primer objetivo de la escuela debe ser motivar a los chicos para que estudien, porque si no hay interés el aprendizaje es poco probable". Esto lo dijo Emilio Tenti Fantfani, del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (IIPE), tiempo atrás.
Y agregó a esta idea* "Las escuelas para los pobres son pobres escuelas": en vez de ser las mejores, promotoras del ascenso social y espacios de auténtica inclusión, les falta estructura, insumos y horas de estudio. "Hay escuelas rurales que tienen cuatro horas de clase, frente a las escuelas privadas de doble jornada. Los hijos de las clases más ricas están estudiando continuamente y los hijos de las clases pobres ni siquiera tienen estímulos para cumplir con la escolarización básica".
* "Sin calefacción, sin canchas de fútbol, sin tizas de colores y pupitres enteros, con pocos maestros y pocas propuestas extraescolares (talleres de música, de teatro, de pintura) y curriculares que hagan más atractiva la cursada, los adolescentes se alejan de las aulas y son muy pocos los que vuelven".
* "Los adolescentes tienen intereses característicos de la edad, como un par de zapatillas o una salida nocturna, y frente a la posibilidad de ganarse 10 ó 20 pesos por día en una verdulería y seguir en una escuela que no los cautiva, se van".
Tenti Fantfani insiste en que las escuelas tienen la obligación de desarrollar el interés de sus alumnos para que estudiar sea la elección que tomen las mayorías. Admite que la mayoría de los niños de los sectores pobres están escolarizados, porque los padres aún creen en los beneficios de la institución escolar, pero al entrar en la secundaria, y sin una familia que los contenga y una escuela que los estimule, los jóvenes se van.
Tiene razón.
Se puede hablar mal de las escuelas. Otro tanto de muchos docentes. Más de los gobiernos provinciales y de su desentendimiento en la materia. ¿Y de los padres qué decimos?
En este comienzo de la segunda mitad del año escolar, donde los chicos pueden remontar de las notas bajas o de cierta indisciplina escolar, bien los padres pueden plantearse qué están haciendo ellos para que a sus hijos les vaya bien con la educación. Quizás así ahorremos dolores de cabeza a fin de año.