VIEDMA (AV).- Educación prepara un esquema de jubilación de un millar de docentes rionegrinos, que siguen en las escuelas aunque cumplen con los requisitos de pasividad.

Esta determinación avanzaría en la renovación del plantel de maestros pero, además, proyectaría un reducción de la masa salarial a partir de la baja del reconocimiento de antigüedad.

El 82 por ciento que Anses garantiza en el haber de los docentes conforma actualmente una característica esencial para los retiros de los maestros con edad jubilatoria pero que optan por seguir en actividad, utilizando el artículo 38 del Estatuto que los habilita para continuar por un plazo máximo de dos años .

La actual edad jubilatoria en la docencia es de 57 años en las mujeres y de 60 años en los hombres, siempre con 30 años de ejercicio.

Cerca de un millar de maestros cumplen con esos requisitos y continúan en las escuelas. El secretario general de Unter, Carlos Tolosa estimó que el número supera los 1.000 maestros y que esa normalización "es exigencia planteada desde hace meses" por parte del gremio docente.

La subsecretaria de Coordinación, Andrea Novillo Pinto admitió que Educación trabaja en un programa progresivo de jubilación, narrando las actividades gubernamentales de las planillas de certificación laboral y de la labor previsional que debe cumplir Anses para su liquidación final.

En esa línea, Educación y Unter acordaron en la última paritaria que se implementará un sistema de "renuncia condicionada", donde los docentes que inicien sus trámites podrán seguir en la actividad hasta la formal incorporación en la liquidación previsional. Hasta ahora, estos trámites requieren la dimisión efectiva, aunque el primer haber se demora entre cuatro a cinco meses.

El año pasado, Educación habilitó sólo un centenar de retiros, aunque se registraron unos 400 docentes en condición de jubilarse.

Ayer, Tolosa destacó su pretensión de normalizar esas jubilaciones "para renovar la planta" y permitir "ese cargo a otro docente", destacando que "los haberes a partir de setiembre ya tendrán los últimos 50 pesos no remunerativos y el 90 por ciento estará blanqueado, sólo quedará afuera el incentivo docente".

Aceptó que el Estatuto ofrece la continuidad por dos años, pero Tolosa destacó que "esa posibilidad se justificaba cuando los docentes se podían retirar con 20 años de servicios", entonces "era entendible que pudieran seguir en actividad aquellos maestros de 40 a 45 años". El dirigente insistió que "ahora no tiene ninguna explicación que sigan en actividad con 57 ó más edad".

El relevamiento gubernamental consigna que una quincena de los supervisores podrían jubilarse.

En cambio, la Unter estimó que son más de una veintena, es decir, casi un cuarto de los 81 supervisores.

La jubilación de un millar de docentes representa entre un 6 a 7 por ciento de la renovación de un padrón que supera los 15 mil docentes.