CUTRAL CO (ACC).- Los vecinos de la comarca petrolera vieron ayer resentido el servicio de agua ante la rotura de uno de los caños que trae el líquido desde el río Neuquén. La escasez se prolongó por varias horas y para la noche, los operarios tenían previsto concluir las tareas de reparación.

El jefe del acueducto que opera el EPAS, Mario Ortega, explicó ayer que durante la mañana advirtieron una baja en el nivel de bombeo y cuando los operarios realizaron las verificaciones hallaron una avería en el denominado caño "nuevo" que corre paralelo al viejo acueducto.

El problema se registró a unos 10 kilómetros desde la planta de tratamiento en la meseta Buena Esperanza. El ducto tiene una extensión de 33 kilómetros y por allí circula el agua tratada que se extrae desde el río Neuquén. Allí, la cuadrilla del EPAS, empezó a trabajar ayer, por lo que el servicio iba a ser restringido. Por la tarde, estaba previsto el corte de agua durante algunas horas y si las tareas se concluían, para la noche iba a estar normalizada la entrega del agua desde la planta potabilizadora hasta la "copa" o reservorio del organismo situado en el barrio Parque Oeste. Desde allí luego se suministra a la malla de distribución domiciliaria.

Racionaron el uso del líquido

Ante este panorama, se sugirió a los vecinos que racionalizaran el uso del líquido, para evitar el desabastecimiento total y los contratiempos que ello genera. De todos modos, para última hora de ayer, se empezaba a normalizar el servicio.

Los vecinos más afectados por esta rotura son los que reciben el agua directa desde la red y carecen de reservorios domiciliarios. En cambio, para aquellos que cuentan con un tanque, pudieron pasar la jornada sin mayores sobresaltos.