| | Viernes 27 de Julio de 2007  | | |  | Edicion impresa pag. 32 > Policiales y Judiciales  | | Acto en Tránsito | | | |      | | | NEUQUEN (AN).- El ministro Jorge Lara encabezó el acto por el 47 aniversario de la Dirección de Tránsito de la Policía neuquina, entregó motos y computadoras y anunció el inicio de remodelaciones en el edificio que ocupa el organismo. El jefe de la Policía Rolando Figueroa, respaldó el trabajo realizado por el área, y se entregaron distinciones al personal por su trayectoria, capacitación y por pasar a retiro. | | | | |  | | | | | | |   | | | | | sus comentarios | Los comentarios que aparecen a continuación son vertidos por nuestros lectores y no reflejan la opinión de la Editorial Río Negro S.A. Los comentarios se publican sin editarlos y sin corregirlos.
nos dejo su opinion | | | 27/07/2007, 11:01:08 | | Patricia Graciela Arismendi | | | | ¿Olvido o Ignorancia? Ayer 27 de julio se cumplió un nuevo aniversario de la creación de la Dirección de Tránsito de la Policía de la provincia de Neuquén. Como ciudadana, hija de un efectivo policial y como policía, tuve la posibilidad de asistir al acto que presidió el ministro Jorge Lara, acompañado por el jefe de la Policía, Juan Rolando Figueroa, con motivo de la fecha antes mencionada. En ese acto, el jefe de Policía realizó una reseña de los 47 años de esa Dirección y agasajó con absoluta justicia a aquellos efectivos que hicieron posible su creación, pero lamentablemente, olvidó o lo que es peor, ignora, es que mi padre, el oficial Alberto Federico Arismendi, fallecido trágicamente el 27 de julio de 1960 (hoy justamente hace 47 años), fue uno de los primeros efectivos policiales caídos en acto de servicio en la historia de la provincia, y modestamente, uno de mentores de la Dirección a la que hoy se le rindió homenaje. En lo personal, me resulta muy triste que las que las máximas autoridades de la policía ignoren la historia de la fuerza a la que pertenecen, pero eso a ellos no les importa porque a quienes nos duelen estas cosas es a quienes sufrimos la pérdida de un ser querido que cumplía con su digna función, sin ningún otro interés que el ser policía. Señor jefe de policía, para su mayor información los restos de mi padre descansan en el Panteón Policial del Cementerio Central de Neuquén capital, y si usted observa atentamente, al ingresar a la Jefatura de Policía, lugar donde se supone que usted presta servicio, hay una placa recordatoria con el nombre de mi padre que está colocada allí desde hace 46 años. Tal vez si se conociera sólo un poco la historia de la institución, se tendría una idea más acabada de la función policial. Patricia Graciela Arismendi DNI 13.254.569 ¿Olvido o Ignorancia? Ayer 27 de julio se cumplió un nuevo aniversario de la creación de la Dirección de Tránsito de la Policía de la provincia de Neuquén. Como ciudadana, hija de un efectivo policial y como policía, tuve la posibilidad de asistir al acto que presidió el ministro Jorge Lara, acompañado por el jefe de la Policía, Juan Rolando Figueroa, con motivo de la fecha antes mencionada. En ese acto, el jefe de Policía realizó una reseña de los 47 años de esa Dirección y agasajó con absoluta justicia a aquellos efectivos que hicieron posible su creación, pero lamentablemente, olvidó o lo que es peor, ignora, es que mi padre, el oficial Alberto Federico Arismendi, fallecido trágicamente el 27 de julio de 1960 (hoy justamente hace 47 años), fue uno de los primeros efectivos policiales caídos en acto de servicio en la historia de la provincia, y modestamente, uno de mentores de la Dirección a la que hoy se le rindió homenaje. En lo personal, me resulta muy triste que las que las máximas autoridades de la policía ignoren la historia de la fuerza a la que pertenecen, pero eso a ellos no les importa porque a quienes nos duelen estas cosas es a quienes sufrimos la pérdida de un ser querido que cumplía con su digna función, sin ningún otro interés que el ser policía. Señor jefe de policía, para su mayor información los restos de mi padre descansan en el Panteón Policial del Cementerio Central de Neuquén capital, y si usted observa atentamente, al ingresar a la Jefatura de Policía, lugar donde se supone que usted presta servicio, hay una placa recordatoria con el nombre de mi padre que está colocada allí desde hace 46 años. Tal vez si se conociera sólo un poco la historia de la institución, se tendría una idea más acabada de la función policial. | | | | | | | | | | | | | | | |
