Pese a robar información confidencial, Mc-Laren-Mercedes Benz fue absuelto ayer por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) del escándalo de espionaje que sacude la Fórmula 1, lo que provocó la indignación de la escudería Ferrari.

El Consejo Mundial del organismo, reunido en París para analizar los hechos, aseguró que McLaren nunca tuvo conocimiento de la información secreta de Ferrari que poseía su ex jefe de diseño Mike Coughlan.

Por lo tanto, las posiciones del Mundial de pilotos y de marcas quedan invariables.

Los 26 miembros del Consejo Mundial, que deliberaron durante casi cinco horas, indicaron que no hay evidencias suficientes. "McLaren-Mercedes Benz estuvo en posesión de información confidencial de Ferrari y por ello incumplió el artículo 151c del Código Internacional Deportivo. Igual, no hay suficientes evidencias de que esa información fuera usada de tal modo que interfiriera de manera inadecuada con el campeonato del mundo de Fórmula 1. Por lo tanto, no imponemos ninguna sanción", señaló la FIA, que escuchó las explicaciones del equipo anglo-alemán.

Sin embargo, la FIA advirtió a McLaren que el asunto podría ser tratado de nuevo en caso de nuevas evidencias.

"Si en el futuro se descubre que la información de Ferrari fue usada en detrimento del Mundial, nos reservamos el derecho de llamar a McLaren ante el Consejo Mundial, donde enfrentará la posibilidad de la exclusión, no sólo del actual certamen, sino también del de 2008", agregó.

"La FIA confirmó lo que decíamos desde el comienzo, que nuestro equipo claramente no se benefició de ideas o diseños de un equipo rival", expresó el director deportivo de Mercedes, Norbert Haug. La advertencia de la FIA tampoco parece atemorizar a Haug.