La mesa de dinero del Banco Central se mostró hoy más activa para aflojar tensiones en el mercado mayorista de cambios y con las ventas oficiales el dólar terminó reacomodándose unos escalones más abajo, en 3,18 pesos.
Las cotizaciones al público, que ayer habían alcanzado su nivel más alto del año, finalizaron en 3,13 pesos para la compra y 3,18 para la venta, con lo que la divisa acusó un retroceso de dos centavos, con un mínimo de 3,17 en algunas entidades.
Entre bancos o en el sector mayorista el "billete físico" descendió 1,35 por ciento a 3,137 pesos, mientras el tipo transferencia se ubicó en 3,139 pesos.
El precio promedio ponderado en el Mercado Electrónico de Cambios -la plaza donde operan los cambistas- fue de 3,1495 pesos por dólar. "La baja se debió exclusivamente a la acción del Banco Central, que estuvo vendiendo dólares y la demanda se mantuvo estable en el caso del mayorista", reseñó la jornada Gustavo Quintana, operador de cambios de López León.
Los operadores coincidieron en que el Central con la ayuda del Nación aportaron divisas para estabilizar los precios. Con todo, los expertos sostienen que se necesitarán unos días para digerir el reacomodamiento de las cotizaciones teniendo en cuenta las posiciones financieras armadas en función de un tipo de cambio que en la práctica se consideraba fijo.
Desde el Banco Central se admite que la volatilidad que mostró la plaza cambiaria sirvió para terminar con la sensación de "un seguro de cambio" para los que persiguen ganancias con el arbitraje entre el peso y el dólar.
La suba de siete centavos que tuvo el dólar en los tres primeros días de la semana golpeó a los fondos especulativos y la modesta intervención del Central generó desconcierto con respecto al camino que seguiría la autoridad monetaria.
Fuente: Télam