SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La tradicional chocolatería Fenoglio, pionera del rubro en la ciudad, construyó un vistoso museo del chocolate ubicado en la fábrica con elaboración a la vista situada en el kilómetro 1 de la ruta al Llao Llao. Ambos ya están abiertos al público y pueden visitarse en el horario de 10 a 20, con un recorrido guiado a cargo de un grupo de promotoras expertas en el producto más dulce de esta ciudad.
A tono con el perfil bajo de los nuevos dueños de Fenoglio, no hubo inauguración oficial ni presentación en sociedad de las nuevas instalaciones. No obstante, en grupos reducidos, empresarios del turismo y el gobernador Miguel Saiz y parte de su gabinete, ya recorrieron las instalaciones, construidas en el último año, con una inversión que, incluyendo nuevas máquinas para la fábrica, superó los seis millones de pesos.
Magníficamente decorada la fábrica que supieron fundar en 1947 Aldo e Inés Fenoglio, dos inmigrantes italianos, cuenta hoy con más de 150 empleados y una producción de gran escala, ya que además de los productos propios elabora toda la línea de chocolates Havanna. En un futuro inmediato la marca "Fenoglio" será comercializada a nivel nacional, en los principales puntos de venta de delicatesen, junto a vinos o otros productos gourmet.
Los barilochenses recuerdan que la empresa familiar comenzó a ser manejada en los años ochenta por Laura y Diego Fenoglio.
Los hermanos no compartían la misma visión empresaria y pronto se separaron. Diego creó su propia marca, Rapa Nui y Laura continuó con el emprendimiento familiar. En pocos años la empresaria concretó negocios fantásticos y logró un crecimiento muy importante. No obstante, no pudo superar la crisis de los noventa y se declaró en convocatoria de acreedores con Fenoglio SACIFIA. Logró dos socios, Guillermo Stanley y Carlos Giovanelli, dos ex ejecutivos del Citibank, que formaron D&G junto con Chrystian Colombo, ex jefe de gabinete de la Alianza. El camino de D&G para adueñarse de Fenoglio se recorrió con el más absoluto bajo perfil. Los compradores no querían que nada se interpusiera en el proceso judicial para saldar los pasivos. Recién ahora, a pocos capítulos de culminar con el concurso, D&G comenzó a promocionar su nueva marca chocolatera.
