Era de esperar. Generalmente los desplantes, una vez que llegan los tiempos felices, se cobran. Y con Brasil en la final de la Copa América, Dunga ya pasó por caja. Ayer el entrenador elogió a sus muchachos y fue muy duro con los dos astros que prefirieron disfrutar de sus vacaciones antes de afrontar el torneo continental.

"Mis futbolistas demostraron amor a la camiseta, ellos aman la selección. Estos jugadores se han quedado sin vacaciones por haber venido a jugar la Copa América", comenzó medido el otrora apodado 'Terminator'. Frente a las prensa, Dunga hizo algunas referencias elípticas a los cracks de Barcelona y Milan. "Yo soy el técnico de los jugadores que están acá, en Venezuela", dijo, y acotó acerca de Ronaldinho y Kaká: "Si no quisieron venir, no podemos hacer nada".

La contracara parece ser Robinho, revitalizado en Venezuela, donde es una de las sensaciones y el goleador de la competencia. Es más, sus piruetas llegaron a España y el flamante técnico del Real Madrid no se durmió en los laureles y lo declaró "intransferible". El otro que anda de parabienes es Julio Baptista. La 'Bestia' entró a último momento en la lista de buena fe, y ahora es uno de los indiscutidos de la selección 'verdeamarelha'.