La gestión de la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti quien llegó al cargo con el kirchnerismo por sus acciones como ambientalista contra las pasteras en Uruguay quedó en el ojo de la tormenta al salir a la luz supuestos contratos irregulares y la sospecha de gastos injustificados, según una nota que publicó ayer el diario "Clarín".
"Todo está claro como el agua (...), no estoy robando", se defendió la secretaria nombrada por Kirchner hace un año.
Picolotti será denunciada penalmente el próximo martes por la presunta comisión del delito de "malversación pública y defraudación" al Estado nacional, según anunció hoy el diputado nacional de ARI Adrián Pérez.
La funcionaria justificó, en tanto, los numerosos contratos de personal realizados por la dependencia a su cargo, al afirmar que limpiar el Riachuelo es como "organizar un Mundial (de fútbol): necesito gente".
Familiares al poder
Según "Clarín", Picolotti, cuya secretaría depende del jefe del gabinete de ministros, Alberto Fernández, y reporta directamente a la Presidencia, contrató a familiares por sumas abultadas e incurrió en gastos injustificados.
"Hay profesionales que cuestan 6.000 pesos y el Estado no paga esos
sueldos, entonces los contrato como 'locación de obra' para hacer algún estudio", explicó Picolotti a "Clarín".
La secretaria, de 36 años, es abogada y previo a su llegada a la gestión pública recibió en marzo del 2006 el prestigioso premio Sofía, un galardón que otorga la corona noruega para recompensar las acciones en favor del medio ambiente.
"Todo el tiempo llegan denuncias en mi contra, porque acá echamos a mucha gente que quedó dolida. No estoy robando", dijo en su defensa.
A Picolotti se le endilga el supuesto alquiler injustificado de aviones privados para realizar sus viajes por el país y la sospecha de desvío de fondos adjudicados a las obras de limpieza de la contaminada cuenca del río Matanza-Riachuelo, en el límite de la capital argentina con la periferia sur.
"Uso el avión del presidente cuando está disponible, aviones de línea cuando es posible y a veces aviones privados, es legal", adujo respecto de las aseveraciones del diario, que le adjudica alquileres de jets privados por sumas que rondan los 20.000 pesos (6.600 dólares).
La denuncia se suma a las críticas que recibió el plan de la secretaría para el saneamiento de la Cuenca Matanza-Riachuelo, una ribera donde desde hace décadas se descargan residuos industriales y cloacales y es el río más contaminado del país con cientos de basurales a cielo abierto.
El plan fue objetado por la Defensoría del Pueblo de la Nación y por organizaciones ambientalistas que calificaron el proyecto de "deficiente".
(AFP y DyN)