A fines del 2006 la pregunta pasaba por saber cuándo volvería Guillermo Coria a luchar por el lugar que supo conseguir, pero medio año después la impresión en el tenis es que el argentino jamás volverá a ser el que fue. Y eso, si es que vuelve a jugar.

El diario deportivo francés "L'Equipe" escribió recientemente que Coria "atraviesa un período negro", y no exageraba. El argentino, que llegó a ser el número tres del mundo en mayo de 2004, figura esta semana 344 en la clasificación. No juega torneos desde setiembre del 2006 y cambió cuatro veces de entrenador el año pasado. Desde el entorno de Coria se anunció repetidas veces su regreso este año, cosa que hasta el momento no sucedió.

Guillermo Cañas, desde esta semana el nuevo número uno argentino, no tiene idea de cuál es la situación de su compatriota. "No sé qué pasó con Guillermo. Entrené con él dos meses antes de Miami, y después nunca volví a saber nada".

Gastón Gaudio, que no ha reencontrado su tenis en el 2007, tradicionalmente enfrentado a Coria en sus tiempos top, también opinó sobre la situación del "Mago": "Le va a ser difícil volver. Tiene un tenis increíble, pero le va a ser difícil. No sé qué está haciendo". El español Tommy Robredo coincide: "Hace mucho tiempo que no se lo ve, no puedo opinar. No sé si volverá a jugar al tenis o no, es una cosa de él".

Coria, quien entrena actualmente en Venado Tuerto con Hernán Gumy, fue siempre un jugador frontal, y eso le generó choques, como el que tuvo con Horacio de la Peña, que lo entrenó 40 días entre agosto y setiembre del 2006.

Cuando la web "aplenotenis" le preguntó a Coria si recordaba a alguien que perjudicara al tenis, apuntó a De la Peña: "Nadie lo puede ni ver. No tengo ningún problema en decirlo porque se lo he dicho en la cara. El se olvida que no es más jugador, y como no sabe cómo llamar la atención, entonces molesta a los demás".

Más allá de esas declaraciones en el inicio del 2007, hace bastante que Coria no habla con la prensa, aunque hizo saber que sigue entrenando y desmintió que estuviera pensando convocar una rueda de prensa en la que debía hacer un anuncio importante. Pero su ausencia llama la atención.

En una columna titulada "¿Qué fue de Guillermo Coria?", el periodista español Javier Martínez llegó a esta conclusión en la web elmundo.es: "La competición apenas guarda un lugar para los ausentes. Menos aún para los perdedores, los que vieron pasar el nirvana por su lado e increíblemente lo dejaron marchar".

Martínez define a Coria como el "argentino que parecía llamado a hacer grandes cosas sobre la arcilla" y de que "el mundo se le desplomó la tarde del 6 de junio de 2004" cuando "no supo atrapar las dos bolas de partido de que dispuso en una extrañísima final de Roland Garros ante Gastón Gaudio". (DPA)