La muerte de un ingeniero brasileño, secuestrado en Irak en el 2005 mientras trabajaba en un proyecto de reconstrucción, fue confirmada por su gobierno el jueves. Los restos de Joao José Vasconcellos fueron identificados y su cuerpo fue enviado a casa, según señaló el ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.

El ministerio informó que el cadáver fue identificado mediante pruebas forenses, pero no remitió más detalles.

El ingeniero fue secuestrado cuando se dirigía al aeropuerto de Bagdad para volver a Brasil. Anteriormente, la nación latinoamericana quedó conmocionada cuando el brasileño Sergio Vieira de Mello, enviado de alto rango de la ONU en Irak, murió víctima de un ataque con bomba en la sede central de la ONU en Bagdad en agosto del 2003.

Vasconcellos trabajaba para la empresa brasileña de construcción Odebrecht en la reparación de una planta de energía cerca de la ciudad iraquí de Baiji, en el centro del país.

El ingeniero fue secuestrado en 19 de enero del 2005, cuando se dirigía al aeropuerto de Bagdad para viajar de regreso a Brasil y su caravana fue atacada.

Informes anteriores señalaban que un grupo autodenominado Escuadrones Al Muyahidín se atribuyó la responsabilidad por la emboscada.

Vasconcellos, que era padre de tres hijos, tenía 50 años cuando fue secuestrado.