Un hecho vale más que mil palabras. Y en ese anda Boca, tratando de materializar este tipo de dichos populares. El ejemplo elocuente de que los 'xeneizes' 'enchufadísimo' lo dieron ayer los titulares, cuando le pidieron al DT practicar a la par de sus compañeros.

Después del partido ante Gremio, Russo pensó en darle descanso a los que sumaron más minutos en cancha. Pero Riquelme, Palermo y cía. lo pararon en seco y le pidieron entrenarse en Casa Amarilla. En la intimidad del grupo también se acordó "evitar manifestaciones triunfalistas" en las declaraciones previas a la revancha el miércoles próximo en Porto Alegre, aunque consideran que el 3 a 0 los dejó en las puertas de la sexta Libertadores.

"Muchachos, sólo ganamos el primer tiempo de los 180 minutos que estamos jugando. Hay que tener tranquilidad e ir a Porto Alegre sabiendo que allá será muy difícil, porque todo el mundo vende cara su derrota", alertó Russo. Y JR Riquelme, DT en la cancha, pregonó igual. "Quedan 90'. Este es un juego muy largo y nosotros nos tenemos que preparar para un partido que allá será muy difícil".

Rodrigo Palacio no se quedó atrás: "hay que tener mucho cuidado, porque en Porto Alegre el partido se va a hacer muy duro por la necesidad que tendrán ellos de salir a buscar el gol".