La Policía española recibió una llamada telefónica en la que un hombre aseguraba tener datos de la niña y que los entregaría a cambio de un millón de dólares. El rastreo la llamado los condujo al territorio argentino, donde está registrado el aparato.

El llamado sobre el paradero de Madeleine MC Cann fue realizado por un falso secuestrador. Así lo informó La Nación en su versión digital.

La policía británica se había esperanzado por contar con una pista "creíble" sobre el paradero de Madeleine, la niña de cuatro años secuestrada el 3 de mayo pasado mientras dormía en el complejo de Praia da Luz, en el Algarve portugués.

"A partir del análisis de la información que se pudo juntar, el autor del llamado se parece más a un aventurero y oportunista que intentó sacar provecho de la desesperación de los padres de la niña", indicaron voceros policiales a "La Nación".

Según se informó, el hombre realizó el miércoles pasado un llamado desde Córdoba con un teléfono celular y pidió hablar con los padres de la niña.

El hombre reclamó un millón de dólares para dar información sobre la pequeña secuestrada.

"Si bien es un ladrón de profesión, ni él ni sus cómplices contarían con la infraestructura necesaria para cometer un secuestro como éste y para tener cautiva a una pequeña buscada en Portugal, España y Gran Bretaña", indicaron las fuentes.

El delincuente, tiene "un importante prontuario policial y antecedentes en este tipo de delitos, asaltos a mano armada y estafas" y "fue el único integrante de una banda internacional de ladrones de joyerías y camiones de caudales que operaba en Córdoba y en España que logró escapar de la justicia española".

Madeleine o "Maddie", como la llama la prensa británica, fue raptada el pasado 3 de mayo mientras dormía en un complejo hotelero de Praia da Luz, al sur de Portugal, cuando sus padres Kate y Gerry cenaban en un restaurante cercano.