ROCA (AR).- Los dos nuevos sospechosos demorados por el crimen del taxista Roberto Cesari (58), un joven de 18 años y su novia de 16, podrían ser indagados hoy por el juez Rubén Norry, luego que ayer llegaran a esta ciudad y fueran alojados las subcomisarías de J. J. Gómez y Stefenelli.

Trascendió también que a la joven que estaría embarazada le secuestraron zapatillas cuya suela se correspondería con los rastros levantados por los investigadores.

Lo que se confirmó ayer es que ambos se entregaron, luego que el muchacho se comunicara telefónicamente con su padre desde San Miguel del Monte, y éste se pusiera en contacto con la fiscalía. Tras comunicar la novedad, el padre del muchacho partió hacia la provincia de Buenos Aires junto con personal de Brigada de Homicidios de la Policía rionegrina.

En un primer momento, había trascendido que los sospechosos había sido detenidos por la Policía en la localidad bonaerense.

Los dos jóvenes designaron como defensor a Eves Tejeda, quien aún no había decidido si les aconsejaría declarar. "Mañana (por hoy) me voy a reunir con los jóvenes", indicó ayer.

En caso de que declaren, el defensor no descartaba pedir que se lleve a cabo una reconstrucción del crimen.

Si bien aún no se conoce la versión de los jóvenes, extraoficialmente se indicó que se habría originado una pelea entre el taxista y los dos jóvenes, aparentemente por el precio de un "raviol" de cocaína.

Aparentemente la discusión y su fatal desenlace se produjo en el mismo lugar donde fue encontrado el cuerpo de Cesari tras cinco días de búsqueda, esto es en un desagüe que corre paralelo a la ruta "Chica", entre el ingreso a J. J. Gómez y el puente de la ruta provincial 6.

Según los trascendidos, la pelea habría comenzado en el taxi de la víctima, y aparentemente, el chofer y el joven se habría tomado del cuello. Habría sido en ese momento, cuando la chica de 16 años le habría pegado con una botella en la cabeza.

En ese momento, y aturdido por el golpe, Cesari habría caído al desagüe y ya no se habría podido levantar.

Siempre según la versión que habrían contado los jóvenes a sus familiares, tras la pelea se habrían alejado del lugar caminando.

A primera vista, lo que es entonces una incógnita, es cómo apareció el taxi de Cesari en una cantera de Barrio Nuevo, ya que aparentemente en el vehículo sólo se encontrarían los dos pasajeros y el chofer a la postre asesinado. Esta versión se contrapone con la primera que manejaron los investigadores en la que se mencionaba de una presunta relación amorosa de la víctima con una mujer, y que tras enterarse el novio de la muchacha, se habría cometido el crimen. En ambos casos está descartado el móvil del robo.

A ambos sospechosos les compararán las huellas dactilares y palmares con las levantadas en el taxi.