El presidente Kirchner no espera ganar la Capital el domingo sino obtener un honroso segundo puesto a través de su candidato a jefe de gobierno porteño, Daniel Filmus, y así disputar la segunda vuelta y exhibir poder en el distrito más díscolo del país.

Para el jefe del Estado este turno electoral es la antesala de las presidenciales de octubre y, por esa razón, la nacionalizó: el Ejecutivo en pleno hizo campaña, con Kirchner y su esposa a la cabeza, los candidatos son miembros del gabinete nacional y el aparato publicitario oficial actuó sin reparos.

Filmus, en el acto de cierre del Luna Park, criticó anoche a Mauricio Macri, y pidió a los militantes kirchneristas que busquen votos "casa por casa". "No somos los que vamos a las bancas solamente si tenemos mayoría, no somos los que faltan tantas veces, como cuando se votaron la derogación de las leyes del perdón y Punto Final", dijo Filmus en alusión a Macri. El presidente lo acompañó en el acto.

En la Casa Rosada consideran que la sola llegada del candidato oficial al ballottage le permitirá a Kirchner decir que logró "torcerle el brazo a la década del '90 representada por Mauricio Macri".

Al mismo tiempo, la posibilidad de que su hombre saque del ballottage a Jorge Telerman es para el primer mandatario una revancha contra Elisa Carrió, una ex aliada de los tiempos en que ambos eran oposición y hoy una adversaria política. Sin embargo, lo que la Rosada no adelanta todavía es su estrategia para la segunda vuelta en la ciudad autónoma si Filmus queda fuera.

Ese es un tema que, por el momento, sólo aparece en la especulación periodística porque Kirchner no adelanta ni una palabra sobre el asunto.

Lo único cierto es que el aspirante kirchnerista a jefe de gobierno creció en las encuestas mucho más de lo que se esperaba y ese dato generó suficiente satisfacción en la Rosada como para impulsar al presidente a participar activamente en los últimos tramos de la campaña electoral.

Aunque reticente al principio, Kirchner intensificó sus apariciones públicas junto a Filmus y no dejó oportunidad de elogiarlo, pero midió cuidadosamente las encuestas después de cada uno de esos gestos para no dar pasos en falso. (DyN)