ZAPALA (AZ).- El fiscal Héctor Trova solicitó 13 de prisión para el ganadero Raúl Victoriano Couso, procesado por segunda vez por abuso sexual agravado contra dos hermanitas de 9 y 6 años ocurrido en una estancia cercana a Loncopué. En tanto, el defensor Eves Tejeda, pidió pidió la nulidad parcial y la absolución por no haberse acreditado los hechos. El fallo se leerá el próximo 31 de mayo.

Cabe recordar que Couso repitió el martes ante los jueces de la Cámara del Crimen de esta ciudad su inocencia, sin embargo, al menos uno de los peritos que intervino en la instrucción de la causa y declaró ayer confirmó ante el tribunal que las niñas habían sido víctimas de abusos reiterados.

Couso -quien reiteró su inocencia- ya había sido absuelto por otros jueces zapalinos pero una revocatoria del Tribunal Superior de Justicia obligó a la realización de un nuevo juicio en su contra.

El proceso siguió ayer con los testimonios de seis personas y la presentación de los alegatos de las partes.

El debate se desarrolló sin la presencia de los medios de prensa por decisión del tribunal alternativo que preside Héctor Mancini e integran Silvia Grichener y Eduardo Sagues.

En primer término, los camaristas debieron resolver un planteo de nulidad que presentó el defensor de Couso, Eves Tejeda, argumentando la imposibilidad de juzgar a una persona dos veces por la misma causa. El reclamo fue rechazado y Tejeda, quien calificó al nuevo proceso como "una sed de venganza" hizo reserva de casación.

Además, agregó que "la única función del fiscal es la de posibilitar la imparcialidad de quien va a juzgar, desaparecido su cometido carece de toda legitimidad su actuación posterior, sobre todo si esa actuación apunta a agravar la situación de la persona ya juzgada", en alusión a la casación presentada por Trova sobre el fallo absolutorio original rubricado por los camaristas titulares, Víctor Hugo Martínez, Oscar Rodeiro y Enrique Modina.

En su testimonio, Couso repitió la versión que había dado en primera instancia en el juicio anterior. En aquella oportunidad, el imputado rechazó haber sido el autor de las violaciones de las pequeñas y responsabilizó a familiares cercanos de las víctimas.

Luego llegó el turno del doctor Gildengers quien ratificó que las hermanitas habían sufrido abuso sexual en reiteradas oportunidades.

Inicialmente, las partes habían acordado no convocar nuevamente a las niñas para ser indagadas con el objetivo de evitar una "victimización secundaria". Ya hubo acuerdo para incorporar un video donde las pequeñas le relatan la pesadilla que les tocó vivir. En caso de que la defensa o la fiscalía decidan ampliar la indagatoria, el trámite deberá cumplimentarse en la misma metodología de acuerdo a lo que establece la ley provincial 2523.

En el proceso contra Couso se incorporó una nueva acusación por lesiones leves hacia una familiar muy cercana del estanciero. El hecho ocurrió con posterioridad a los abusos y entre las testigos que figuran en la nómina se destacan la esposa y la hija de Couso.