Martes 22 de Mayo de 2007 Edicion impresa pag. 16 > Regionales
Otra vez se cayó un techo en un terciario neuquino
En el Instituto de Formación Docente Nº 6 ya había pasado algo parecido, hace seis meses. Como el episodio ocurrió durante el fin de semana, no hubo riesgo para docentes ni alumnos. Se desprendieron paneles de yeso.

NEUQUEN (AN).- Por segunda vez en seis meses se cayó un techo en el Instituto de Formación Docente 6.

Afortunadamente no hubo que lamentar daños entre los docentes y alumnos porque ocurrió en algún momento del fin de semana, con la escuela sin actividad.

Esta vez el derrumbe sucedió en la secretaría del establecimiento, un ámbito en el que se desempeñan tres directivos, y visitado diariamente por los estudiantes.

En la escuela saben de este tipo de problemas porque a finales del 2006, una joven estudiante salvó su vida y la de su bebe de forma fortuita cuando se derrumbó el techo de la cocina mientras daba de amamantar.

Precisamente ese episodio hizo que el Consejo Provincial de Educación parara las clases para facilitar las obras en el techo de casi toda la escuela.

Ayer la regente de la institución, Gladis Di Rienzo, encontró los paneles de yeso tirados en el piso de la oficina.

Cada uno de los rectángulos de casi un metro de largo pesan cerca de cinco kilos y habían sido colocados a una altura aproximada de tres metros. "La pregunta es qué habría pasado si ocurre en horario de clase", planteó la docente, preocupada.

Al parecer los paneles quedaron en el piso por la debilidad de los perfiles que los sostenían. Las varillas de metal quedaron colgadas de la pared, y podrían haber cortado a quien estuviera debajo en el momento de la caída. El derrumbe también dejó al descubierto la instalación eléctrica. Los cables resistieron, y por eso no hubo un cortocircuito debajo del techo principal, construido en madera.

El cielo raso colapsado había sido colocado el jueves pasado. Fue una obra de último momento, porque tras el paro docente, en la institución le pidieron a la empresa que colocara los paneles en un ámbito que no había sido reacondicionado.

"Es una oficina continuamente visitada por los alumnos. Entran a tocar el timbre para el recreo. Además es donde reciben los certificados de escolaridad", explicó la regente del nivel Primario de la escuela.

Abel Marchisio, director de la escuela ubicada en Amancay e Islas Malvinas, señaló que "a simple vista se constata la precariedad con que fue realizado este tramo de la obra". Los directivos hicieron el reclamo en el CPE, y los constructores se presentaron ayer al mediodía. En las aulas hay paneles similares que fueron colocados antes del inicio de clases.

Este establecimiento tuvo un último semestre complicado. Luego del primer derrumbe, las clases fueron afectadas para las reparaciones. El cronograma de obras debía seguir durante el verano. Pero a principios del ciclo lectivo, las autoridades debieron postergar las fechas de exámenes por que los arreglos no se habían finalizado. Las obras habían sido concluidas cuando surgió el derrumbe del último fin de semana.

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