NEUQUEN (AN)- La fiscal de Delitos Complejos, Gloria Lucero, se apartó de las dos causas más delicadas que le tocaron en los últimos tiempos: la ocupación del edificio del Consejo Provincial de Educación ocurrida el año pasado y la represión de los docentes en Arroyito, que tuvo como saldo el asesinato del profesor Carlos Fuentealba.

La información fue confirmada ayer a "Río Negro" por fuentes judiciales. Según trascendió, la fiscal habría sentido "violencia moral" a raíz de las numerosas críticas que recibió por su desempeño en las dos causas.

Otras fuentes indicaron que la funcionaria habría recibido la sugerencia de apartarse ante la polvareda que levantaron algunas de sus decisiones.

La más polémica fue pedirles a los directores de escuelas secundarias que identifiquen a los integrantes de los centros de estudiantes. Lo fundamentó en la necesidad de investigar a quienes ocuparon el edificio del CPE durante 17 días en noviembre del año pasado.

Organismos de derechos humanos, el foro por la ley 2.302 y dirigentes políticos salieron a criticarla, y hasta la denunciaron penalmente por presunto abuso de autoridad.

La otra investigación que Lucero manejaba hasta ayer está relacionada con la represión del 4 de abril en Arroyito. Los sucesos ocurridos ese día fueron desdoblados en expedientes distintos: uno, el asesinato de Fuentealba, está a cargo de la fiscal de Homicidios, Sandra González Taboada. El otro, relacionado con todo el accionar policial, quedó en manos de Lucero.

Precisamente al criticar a la fiscal de Delitos Complejos, los organismos de derechos humanos compararon su interés por investigar a los alumnos de los centros de estudiantes mientras que en el caso de la represión en Arroyito "no propuso ninguna medida".

Durante el conflicto docente, Lucero tuvo cierto protagonismo: intentó ingresarles alimentos a los policías que quedaron encerrados en la Casa de Gobierno, cuando los manifestantes instalaron carpas a su alrededor, y apenas se levantó el cerco se hizo presente para relevar los daños causados por los maestros en el edificio.

El año pasado la fiscal estuvo propuesta para ascender a jueza por el Tribunal Superior de Justicia, pero su pliego quedó trabado cuando entró en vigencia la Constitución provincial reformada y cambió el mecanismo de selección de magistrados.

Las causas que dejó pasarán a otros fiscales para que las investiguen.