CIPOLLETTI (AC).- Ante un pedido expreso del laboratorio de alta complejidad de la facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA, la jueza Alejandra Berenguer envió por medio de un funcionario de la justicia más muestras extraídas del esqueleto que corresponde a una jovencita, hallado en una exclusa de la usina del paraje El Treinta, y que se trata de determinar si pertenece a la estudiante Otoño Uriarte (16), desaparecida en Fernández Oro el 23 de octubre del pasado año. Por eso la expectativa con el ADN.

La nueva derivación se produjo habida cuenta que las que se llevaron en un primer momento, tenían -y este dato ya era conocido- un marcado deterioro, por el tiempo en que el cuerpo estuvo expuesto al agua y a elementos que arrastra la correntada. Ese deterioro habría influido en la realización del análisis por lo que el laboratorio reclamó más muestras.

Berenguer confirmó el envío -serían de partículas óseas y de piel que los forenses rescataron de los restos- con el fin de garantizar que el análisis arroje un resultado que no deje resquicios de dudas.

Para mayor seguridad, dijo Berenguer que también se habían llevado muestras de los restos al Hospital Durand de Buenos Aires.

En ninguno de los dos casos dio tiempos de finalización de los análisis, pero entendidos en la materia dejaron entrever que por lo menos correrían otros diez días.

Roberto Uriarte y la madre adoptiva Ana Becerra- le había pedido al ministro del Interior Aníbal Fernández, en una audiencia concedida en la Casa Rosada, que se hagan otros análisis de ADN en el Durand. Según uno de los familiares que concurrió a la cita, el ministro comprometió sus gestiones para este segundo ADN.

La autorización de Berenguer de presentar en el Durand las muestras podría tener alguna relación con aquel contacto.

Los dos ADN son clave. Si dan positivo, y los restos son de Otoño, Berenguer le entregará todo el expediente a la jueza María del Carmen García García, que maneja la causa de la "privación forzada de libertad" de Otoño, y que ante ese supuesto se le añadiría "seguida de muerte". Si son negativos, el problema se agravaría al extremo, porque habría una chica muerta y otra desaparecida con destino incierto.