SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- A una semana de las elecciones provinciales, las dificultades surgidas para asegurar las autoridades de mesa se convirtieron en la principal preocupación de los organizadores del comicio.
El juez de Paz, Héctor Fabbri, aseguró que de los 600 designados en primer término, hasta ahora más de la mitad no pudieron ser notificados. "En la mayoría de los casos el Correo devuelve los envíos porque tienen errores en el domicilio", explicó el funcionario.
También hubo algunas renuncias por razones de trabajo o por viajes impostergables. Y la chance de instrumentar una convocatoria masiva de voluntarios es un fracaso seguro, dado que los presidentes de mesa y sus auxiliares deberán trabajar gratis.
A diferencia de lo que ocurre con las elecciones nacionales o municipales, el gobierno provincial decidió no pagar por la tarea.
En los comicios organizados por el municipio (que tienen fecha provisoria para el 27 de mayo), la remuneración asignada es de 50 pesos y al llamado que formuló la Junta Electoral respondieron ya unos 180 interesados.
Fabbri trasladó el problema a sus superiores en Viedma, pero le confirmaron que "la decisión es no pagar". Explicó que el margen de acción de la Justicia Electoral no es mucho porque "tiene la obligación de poner en marcha las elecciones con el presupuesto que aprueba el Ejecutivo".
Si el próximo domingo las autoridades no están designadas, lo previsto en la ley es que la carga pública recaiga sobre los primeros votantes que se presenten. Algo que suele ser motivo de enojos y ásperas discusiones.
La tarea previa a una elección puede parecer muy burocrática, pero tiene sus costados complejos. Desde su experiencia, Fabbri recordó que cuando el trabajo de las autoridades de mesa fue remunerado "se presentó mucha gente" y él como responsable de las designaciones debió manejarse en un límite muy fino "para no caer en la discriminación".
"Es común que se ofrezcan personas que apenas son changarines, no tienen más que tercer o cuarto grado y necesitan los cincuenta pesos explicó. Yo trato de no rechazarlos y si puedo los pongo de segundo suplente y les digo que el presidente se va a encargar de todo. Aunque no esté capacitado, tengo que darle el derecho a ejercer una vocación cívica".
No obstante, el hecho de que este año las autoridades deban trabajar gratis obligará a redoblar esfuerzos a fin de garantizar el servicio electoral.