La violencia en Irak tiene muchos rostros. Recientemente ha mostrado uno de los más crueles. La lapidación de una chica de 17 años de la secta yazidí ha provocado una ola de violencia en el norte del país. Doaa Aswad, pertenecía a una pequeña secta que venera al Diablo, pero se enamoró de un musulmán y se convirtió al Islam, para poder casarse con él. Cuando volvió a casa, 2.000 personas de su pueblo, observaron como un grupo de ocho o nueve hombres la apedrearon hasta la muerte.

La escena fue grabada por un vecino anónimo con un teléfono móvil. Allí aparece una chica morena vestida de rojo que intenta evitar las piedras que un grupo de hombres le está lanzando.

La chica está cubierta por su propia sangre, y además, intenta levantarse en muchas ocasiones, pero otra persona la empuja y alguien con un trozo de hormigón le machaca la cabeza.