NEUQUEN.- El juez federal Guillermo Labate negará la prisión domiciliaria al general de brigada (re) Enrique Braulio Olea (76) y al teniente coronel (re) Oscar Reinhold (72), militares procesados por delitos cometidos durante la última dictadura, por lo que serían trasladados la semana entrante a unidades penitenciarias federales de Buenos Aires.

Olea tiene su residencia en Pilar, mientras que Reinhold en Buenos Aires; por lo que el traslado hacia una penitenciaría federal bonaerense obedecería a que permanecieran en una cárcel cercana a la residencia de sus familiares.

Dentro de los planes de Labate también estaba prevista la indagatoria y detención de otros imputados (en total el listado es de 44 entre militares y policías retirados), que serían albergados en la delegación Neuquén de la policía federal donde permanecerá hasta el juicio oral Luis Alberto Farías Barrera, mayor (re), luego de que se le negara la prisión domiciliaria.

La voluminosa causa Neuquén de los Derechos Humanos recaló hoy en la Cámara Federal de Roca, que deberá definir si mantiene los procesamientos dictados por Labate el 17 de abril pasado o hace lugar a la apelación presentada por los defensores.

Debido a que el procesamiento se definió en base a las constancias y pruebas de la causa, para que el tribunal federal defina se envió una copia certificada de los 27 cuerpos y 60 legajos que integran el expediente, ya que Labate requerirá de la misma documentación para continuar con la investigación de los otros hechos.

La prisión preventiva y el procesamiento de Olea, Reihold y Farías Barrera fue por asociación ilícita agravada, privación ilegal y violenta de la libertad, aplicación de tormentos físicos y psíquicos, robo y allanamiento ilegal en hechos relacionados con las puesta en funcionamiento del centro clandestino de detención "La Escuelita" que funcionó en los fondos del batallón 181 de Neuquén.

A los tres les trabó embargo de un millón de pesos a cada uno y les negó la prisión domiciliaria por estar acusados de hechos gravísimos de lesa humanidad, y continuados en el caso de las personas que permanecen desaparecidas; por entender que fuera de la cárcel podrían entorpecer el desarrollo de la investigación que continúa a su cargo; y porque los exámenes médicos y sicológicos dieron cuenta de tres personas que gozan de buena salud, se indicó.

Fuente: (ACE).