PARIS (AFP) - El líder de la extrema derecha, Jean Marie Le Pen, y el candidato de centro, François Bayrou, perdieron su apuesta y se convirtieron hoy en los derrotados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas.
Sin embargo, con un 18% de votos, Bayrou no puede incluirse en el campo de los perdedores, ya que triplicó su resultado de 2002 y su partido, la Unión por una Democracia Francesa (UDF), se convirtió en la tercera fuerza política de Francia.
Por su parte Le Pen, con un 11% de los votos, frente al casi 17% logrado en 2002, quedó en cuarta posición, después de haber sido segunda fuerza más votada en las presidenciales de hace cinco años.
Pese a encontrarse alejados de los dos aspirantes más votados --el conservador Nicolas Sarkozy, con un 30% de los votos y la socialista Ségolène Royal, con entre 25 y 26%-- Bayrou y en menor medida Le Pen, podrán usar su influencia y sus votos de cara al duelo final del próximo 6 de mayo.
"Jean Marie Le Pen y François Bayrou tienen condiciones para convertirse en árbitros", explicó Roland Cayrol, director del instituto de sondeos CSA, que previó una segunda vuelta "muy ajustada".