VIEDMA (AV).- Sin actos masivos propios, la campaña oficialista se concentrará en reuniones institucionales y personales que encabezará el gobernador Miguel Saiz.

Sólo se prevé -por ahora- una movilización multitudinaria de cierre. Otros planes de amplias convocatorias fueron desestimados en una reciente reunión del comité de campaña, que delineó los lineamientos estratégicos. Existió una coincidencia proselitista: "reuniones chicas o grandes con instituciones, pero hay que llegar con respuestas". Dos razones se esgrimieron: "volver a escuchar pedidos sin soluciones es contraproducente" y, además, Saiz se fastidia si queda expuesto "al tironeo y el reclamo".

Estas conclusiones explican los subsidios y anuncios con los que el gobernador arriba en cada visita a las ciudades. Quedará para el futuro develar qué será de las promesas pendientes.

El análisis del comité de campaña reunió a Mario De Rege, Pablo Verani, Daniel Sartor, Bautista Mendioroz, Jorge Pascual, Iván Lázzeri y, entre otros, Francisco González y Claudio Mozzoni.

Saiz abrirá hoy la agenda de la semana con participación en actos en Guardia Mitre y mañana seguirá con Sierra Grande.

Quedan 40 días de campaña y en algunos pueblos se cumplen -como Guardia Mitre- la última presencia pre-electoral de Saiz.

Más asistencia se programa para las ciudades mayores. En Bariloche se pretende una visita semanal aunque la próxima recién será el martes 17 y miércoles 18. Antes, el gobernador quiere clarificar ese escenario, es decir, si finalmente se concretará la elección local del 27 de mayo.

La persistencia del proceso comicial y la campaña del intendente Alberto Icare incomoda al oficialismo, aunque mantenga la convicción que no se llegará a votar. Esa visión aún es un deseo, pues todo sigue adelante para que Bariloche elija una semana después del comicio provincial.

Los cuestionamientos siguen en la Junta Electoral local. La UCR no formalizó oposición a la convocatoria, pero sigue atentamente las presentaciones realizadas por el ARI y el MPP. Con

fían que el STJ inhabilite esa fecha local. Para eso, el conflicto debe llegar a esta instancia. Hasta ahora, la irresolución mantiene la movilización y la instalación proselitista de Icare, que -en definitiva- es la preocupación y la exclusión pretendida por el oficialismo.

Bariloche es de por sí un reducto donde Saiz se mueve con incomodidad. En base a la estrategia electoral, Obras Públicas evalúa qué anunciar en la próxima presencia, repasando obras para la Avenida Bustillo, el Centro de Convenciones, la Terminal de Omnibus o la playa de estacionamiento de Cerro Catedral.

Así, Saiz continúa con sus actos institucionales mientras capitaliza otros, con algunos riesgos. El viernes se sorprendió con una silbatina en la Fiesta del Golfo en Las Grutas. "Estaba preparado y era un sector radicalizado", fue la explicación oficial frente a ese trago amargo. El hecho alertó a un gobernador confiado y entusiasta. Una sensación que actualizó el jueves cuando Enrique Zuleta Puceiro lo llamó y le adelantó que la tendencia lo sigue favoreciendo por 10 puntos (ver aparte). Además, le acercaron el sondeo de Ricardo Vignoni que pronostica una ventaja menor (de 6 puntos).