SIERRA GRANDE (ASG).- Desde hacía años que no sonaban redoblantes y bombos de protesta en la municipalidad de Sierra Grande. Los ruidos golpearon las puertas del gobierno municipal, como en los viejos tiempos para pedir por trabajo.

Una treintena de trabajadores de la construcción se movilizaron el martes en reclamo de fuentes laborales. A pesar que eran pocos se hicieron sentir por varias horas en el municipio serrano que se encontraba fuertemente custodiado por la fuerza policial provincial.

Los obreros de la construcción -nucleados en la UOCRA- reclaman fundamentalmente el estado provincial cumpla con una serie de obras comprometidas y que no fueron realizadas.

La columna de manifestantes marchó con bombos y pancartas desde la sede local del sindicato con destino al municipio, donde entregaron un petitorio a las autoridades.

En esa jornada el intendente Nelson Iribarren había viajado a Viedma para cerrar algunos acuerdos vinculados a la obra de la traza del camino a Playas Doradas. Por lo tanto el delegado gremial de la UOCRA, Daniel Correa, fue recibido por el secretario de Obras y Servicios Públicos, Fabián Aragolaza, los ediles Ramón Fortete, Mirta López y la presidente del cuerpo Josefina Vasini, a cargo de la intendencia.

A la salida de la reunión Correa informó a los obreros que esperaban en el pasillo principal del municipio, que lograron el compromiso de Aragolaza que el 10 de abril el gobernador Miguel Saiz estará en Sierra Grande y anunciará algunas obras para esta ciudad como la construcción de la escuela especial y cloacas para los barrios. Los obreros reclaman que el estado provincial cumpla con los compromisos que efectuó hace un año.