ROCA (AR).- Cerca de 400 choferes de taxis roquenses siguen trabajando de manera irregular, por lo cual desde el sindicato que los nuclea amenazan si no se revierte el panorama laboral no descartan tomar medidas de fuerza.
El anuncio fue realizado por el titular del gremio, Mario Riquelme, quien señaló que "la situación es preocupante y ningún intendente ni el gobernador se hace cargo del tema".
Si bien en febrero último hubo un principio de avance para allanar el camino, todo quedó detenido. "Desde la Asociación de Titulares de Taxis de Roca (Actaro) ofrecieron una propuesta irrisoria y por eso la rechazamos", resaltó Riquelme. "Nos quisieron imponer la mitad del salario mínimo y la retención del 5% de la recaudación para aportes, tratando de que nosotros sostuviéramos todo", detalló.
En tanto, la intención fue discutida ampliamente por los referentes de los taxistas y rechazada por unanimidad, aunque sí se avaló un incremento en la tarifa del servicio para trasladarlo al bolsillo de los trabajadores.
Se trata del pedido a los concejales para que autoricen que la bajada de bandera llegue a los $2 y 0,13 centavos cada ficha (actualmente están en 1,50 y 0,12, respectivamente).
A fin de avanzar en la regularización de la actividad, desde el sindicato se propuso al intendente Carlos Soria y a los ediles reformar la ordenanza que regula el servicio en esta ciudad.
Así, de acuerdo a lo manifestado, se debería establecer que el Ejecutivo es el "dueño" de las licencias y por lo tanto debería exigir y verificar que los permisionarios cumplan con la reglamentación laboral vigente.