SANTIAGO DEL ESTERO (Télam).- El estudiante de abogacía José De Yebras Uñates, detenido por los homicidios del empresario Carlos Curi y de su hija Carolina, cometidos el 17 de marzo pasado en Santiago del Estero, dijo ayer que no recuerda "absolutamente nada" del doble crimen.

En tanto, el juez y el fiscal a cargo de esta investigación, realizaron ayer una inspección ocular e hicieron entrega de la lujosa propiedad a los familiares de las víctimas.

Durante más de dos horas, De Yebras Uñates fue indagado por el juez de instrucción Ramón Tarchini Saavedra y el fiscal Cristian Vittar, pero no aportó datos sobre lo sucedido.

"El acusado dijo que no recuerda nada a partir del accidente de tránsito que tuvo horas antes, y que la relación con su novia -Carolina Curi, una de las víctimas- resultaba normal y que son mentiras que ella intentó dar por terminada la relación que los unía", reveló el fiscal.

Vittar dijo que De Yebras Uñates "aclaró que la noche previa a los crímenes no tuvo ninguna discusión ni pelea con su novia e insistió en que lo único que recuerda es el accidente que protagonizó con una camioneta".

"No recuerda cómo se encontraba en la casa de los Curi, ni en qué se trasladó al lugar, declaraciones que no cambian su situación en la imputación de homicidio calificado con alevosía", añadió.

Por su parte, el abogado defensor del joven, Diego Lindow, dijo que su cliente "respondió a todas las preguntas" realizadas por el juez que investiga el caso.

"Colaboró con la justicia, dijo todo lo que sabía, obviamente que no respondió nada de lo que no recuerda del ataque a la casa de los Curi", explicó Lindow mientras acompañaba la salida de De Yebras Uñates, en medio de un fuerte dispositivo policial ante el temor a represalias.

Tras la indagatoria, De Yebras Uñates volvió a su lugar de detención en la enfermería del Penal de Varones de Santiago del Estero, lugar en el que sus familiares reclamaron "mayor seguridad" porque temen por su vida.

El joven de 26 años está acusado de estrangular a su novia Carolina Curi y de asesinar a cuchilladas a su suegro, el empresario Carlos Alberto Curi. También, de herir de gravedad a su suegra, Marcelina Vizgarra.

En tanto, volvió a agravarse ayer la salud de Vizgarra, quien permanece internada en una sala de terapia intensiva del hospital regional "Ramón Carrillo" de la capital provincial.

El director del centro asistencial, Guillermo Murad, explicó que a la mujer de 54 años se le volvió a colocar un respirador artificial y que se la mantiene "en coma farmacológico".

"Tiene una infección generalizada en todo el cuerpo, su estado es delicado a raíz de las graves lesiones", añadió Murad, al referirse a las 13 cuchilladas que presenta en el rostro, cuello, tórax y abdomen.

A la inspección ocular en la casa del doble asesinato asistieron representantes legales y familiares del acaudalado empresario de la construcción, y de los abogados defensores del único acusado.