SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Después de más de tres semanas sin que se produzcan novedades sobre la confusa desaparición de un taxista y el vehículo que conducía, el juez Martín Lozada libró una orden de captura contra Ernesto Aguirre, el conductor del taxi 069, y otra de secuestro para el vehículo Fiat Siena que su propietario le había confiado.

Pocas horas después de la desaparición de Aguirre, cuando todos creían que había partido a las 3 de la madrugada del lunes hacia Alicura con pasajeros, la preocupación de sus compañeros fue en aumento, tanto que llegaron a congregarse y cortar el tránsito en torno al Centro Cívico, y hasta se plantearon realizar medidas de fuerza para reclamar su aparición.

Luego de que trascendiera que Aguirre habría tratado de vender por algunos pesos en Río Colorado la base de comunicaciones del auto, el crique y la rueda de auxilio, y que una persona conocida lo viera manejar en forma tranquila el auto en cercanías de Chichinales, comenzaron a conocerse anécdotas en las que le atribuyen un auto robo, en ocasión en que lo encontraron en el baúl del taxi que conducía, y otras veces no haber rendido en forma satisfactoria la recaudación, después de cumplir horarios nocturnos conduciendo taxis.

No descartan que haya intentado llegar a la provincia de Buenos Aires.