SANTIAGO (DPA/Télam/AFP).- Los gobiernos de Chile y Perú establecerán un cerco policial en su frontera común para evitar que hoy una anunciada marcha de peruanos en un "Acto de reafirmación de la soberanía nacional" hacia territorio chileno termine en un incidente diplomático.
El ministro del Interior de Chile, Belisario Velasco, adelantó que "si alguien cruza la frontera, será detenido, fichado y expulsado del país" aunque el jefe de Gabinete aseguró que "no se va a disparar" a los manifestantes que violen los límites.
En declaraciones a la agencia DPA, Velasco advirtió que el lugar previsto para la protesta aún está minado por lo que es "altamente riesgoso que alguien atraviese esta zona". El "acto de afirmación de la soberanía nacional" incluye un recorrido hasta el punto en que está la frontera marítima según la interpretación peruana, en la víspera del aniversario 128 de la declaratoria de guerra al Perú por parte de Chile. El ministro chileno confirmó que las cancillerías de ambos gobiernos negociaron un plan de acción para contener la protesta, impulsada por el ex candidato presidencial nacionalista, Ollanta Humala. La Guardia Civil peruana tendrá la obligación de detener a los manifestantes a 100 metros de la frontera, pero si ese cerco falla intervendrá la policía uniformada chilena.
Tras reunirse con la presidenta chilena Michelle Bachelet y el propio Velasco, el canciller Alejandro Foxley reveló que la marcha preocupa al gobierno y si bien descartó que el evento termine en un conflicto diplomático, dijo que "nadie entre a territorio chileno ilegalmente".
La situación complica a ambos gobiernos que actualmente gestionan una serie de gestos de acercamiento, para crear una alianza comercial que aproveche los mercados del sudeste asiático.
Analistas independientes del Perú se sumaron ayer a las críticas contra el acto del Partido Nacionalista Peruano (PNP) en la frontera con Chile, por considerar que es algo publicitario que puede traer resultados negativos.
"Este es un acto puramente mediático y propagandístico", afirmó por ejemplo el analista Carlos Reyna, quien criticó al líder del PNP, Ollanta Humala, por recurrir a ese tipo de gestos para manifestar su oposición al gobierno de Alan García. "(Humala) debería intentar competir con el gobierno no en quién es más radical con Chile, sino en quién es más consecuente en la defensa de la educación pública, la salud, la descentralización o la moralidad en la gestión pública", manifestó Reyna.
El "acto de afirmación de la soberanía nacional" fue también rechazado antes por el gobierno peruano. Para el presidente del Consejo de Ministros, Jorge del Castillo, es "un acto irresponsable con tufillo politiquero".
Portavoces del PNP rechazaron las críticas y reafirmaron por el contrario el carácter "patriótico" de la manifestación. "Aceptar las advertencias de Chile sería aceptar que (los chilenos) controlan un territorio que se encuentra dentro del Perú", afirmó Abugattas, quien junto a Ordóñez y varios parlamentarios más acompañaran en la movilización al líder del PNP, Ollanta Humala.
Las relaciones entre Chile y Perú son históricamente conflictivas, debido a las dos guerras que los enfrentaron en el siglo XIX. Entre 1879 y 1883, Chile, Perú y Bolivia protagonizaron la llamada Guerra del Pacífico. Santiago se anexionó miles de kilómetros cuadrados pertenecientes a sus vecinos, dejando a La Paz sin salida al mar.
